La empresa Ledesma, una de las más importantes del Norte argentino, despidió 14 trabajadores dos días antes del fin de año, en lo que podría ser el comienzo de una nueva escalada de conflicto en esa firma.

Voceros de la empresa, que es una de las principales productoras nacionales de azúcar, bioetanol en base a caña, jugos de frutas y papel, y que es propiedad de la familia Blaquier, aseguraron a la agencia Telam que las cesantías se debían a “razones presupuestarias”.

“Los despidos no tienen relación alguna con el paro reciente”, agregaron, en relación al conflicto que entre agosto y octubre sacudió a la provincia de Jujuy y que enfrentó a los trabajadores de Ledesma con la empresa por las paritarias y el reconocimiento de la directiva del sindicato de empresa, el SOEAIL.

Los voceros indicaron, además, que la empresa tenía «balances negativos» y que por ello debía “adecuar sus costos en todos los órdenes”.

Por su parte, el SOEAIL vinculó las cesantías a “despidos sin causas” y a un “claro acto de revanchismo”. Rafael Vargas, secretario General del SOEAIL, declaró: “Nos sorprende esta acción de la empresa, a la que vinculamos con un claro acto de revanchismo porque los afectados son trabajadores que adhirieron en su momento a medidas de fuerza dispuesta por el sindicado”.

Los trabajadores cesanteados prestan servicios en distintas secciones de la empresa y participaron de los paros de agosto-octubre.

Según un informe de la calificadora de riesgos Fix Scr, del 2 de marzo de 2017, Ledesma “es líder en el negocio de papel y cuadernos con una participación de mercado aproximada de 45% en resmas y 43% en cuadernos, cuenta con una fuerte posición en el mercado de azúcar minorista, donde sus ventas representan cerca del 30% del total y detenta una importante participación en la fabricación de bioetanol”.

La calificadora, con todo, advirtió sobre la debilitada situación financiera de Ledesma.