El gobierno bonaerense resolvió este miércoles abrir la negociación paritaria con los gremios estatales que representan a los trabajadores nucleados en la ley 10.430. El encuentro, que será el primero del año, fue convocado para el próximo martes, un día antes que la quinta reunión con los docentes.

La convocatoria llegó un día después de la instalación de la carpa de los estatales de ATE, los judiciales de AJB y los médicos de la CICOP -a la que también se plegó el Frente de Unidad Docente- frente a la Gobernación para reclamar por apertura de paritarias y salarios dignos. Estos gremios llamaron además a un paro provincial para el jueves 5 en coincidencia con la medida de fuerza anunciada por los maestros.

El secretario general de ATE Provincia, Oscar De Isasi, fue el primero en avisar que si el gobierno ofrece una suba del 15% será rechazada. «Si Vidal nos vuele a ofrecer como en la paritaria docente un 15% en cuotas, lo vamos a rechazar categóricamente. Hasta sus propios economistas señalan que la inflación no será menor que el 20%, por esto la propuesta salarial nos debe servir para recuperar el poder adquisitivo perdido», dijo.

El dirigente dijo que también pedirán «la reincorporación de los despedidos en el Estado provincial, el pase a planta permanente de los que realizan tareas precarias que son cerca de 15 mil en la provincia, la designación de personal en las áreas críticas, la reactivación del Astillero Río Santiago y la defensa irrestricta del IPS y el IOMA».

«El gobierno no quería abrir otra paritaria, quería desgastar a los docentes e imponer salarios a la baja. Pero la lucha de todos los estatales en unidad le torció el brazo a Vidal que tuvo que llamarnos a las paritarias», sostuvo De Isasi.

En 2017, el gremio UPCN y la federación FEGEPPBA fueron los primeros en cerrar la paritaria con Vidal al firmar un acuerdo por una suba del 18% en cuatro cuotas de 4,5% y avalar la cláusula gatillo. Este año si bien hubo contactos informales con los funcioanrios, no hay todavía avances concretos. Desde ambos gremios reivindican esa herramienta y piden que se reedite en 2018. No tienen previstas medidas de fuerza por ahora.