Después de la fallida reunión con la ministra de educación porteña, Soledad Acuña, los estudiantes que mantienen tomados más de 30 colegios secundarios en rechazo a la reforma educativa llamada la escuela del futuro brindaron una conferencia de prensa en la que aseguraron que continuarán con las medidas hasta que se suspenda la aplicación de la reforma y se abra un espacio de diálogo con la comunidad educativa.
Después de cuatro semanas de conflicto Acuña tuvo diálogo con los alumnos. Aunque no hubo acuerdo, sí firmaron un acta que llevó más de dos horas redactarlas. Durante la reunión, la ministra aseguró que lo que generó el conflicto fue un documento interno. Sin embargo, los alumnos mantuvieron sus pedidos: no trabajar gratuitamente, no perder horas de clase reemplazadas por pasantías laborales, un protocolo contra la violencia de género, aplicación de la ley de Educación Sexual Integral, cese de la presencia policial en las escuelas y mejores edilicias.
«Por su carácter inconsulto y el desconocimiento del modo de aplicación y las características de fondo de la reforma, no están dadas las condiciones para que empiece a aplicarse la reforma», afirmó Santiago Lezati, del centro de estudiantes del colegio Nicolás Avellaneda, durante la conferencia de prensa. Este viernes, a las 17, los estudiantes marcharán desde el Ministerio de Educación de la Nación hasta el Ministerio de Educación porteño para continuar con los reclamos.