Las sospechas sobre cambios de domicilios, la constatación de la existencia de una fotografía con el explosivo colocado en la casa de un ex funcionario de Defensa y el temor a que “alguno se escape” impulsaron al juez Federico Villena a ordenar hoy las 22 detenciones en el marco de la causa por presunto espionaje ilegal durante el gobierno de Cambiemos.

Las defensas de los imputados cuestionaron la decisión del juez porque se asemeja a la Doctrina Irurzun, repudiada por los ex funcionarios del gobierno 2003-2015 detenidos sin condena.

El criterio establecido por un fallo firmado por el presidente de la Cámara Federal, Martín Irurzun, en 2017, permitió encarcelar a, entre otros, el ex ministro de Planificación Julio De Vido por la supuesta existencia de un “poder residual” que le facilitara obstaculizar las investigaciones por su actuación como funcionario.

Las detenciones ordenadas hoy por Villena invocaron como fundamentación que “la magnitud de la estructura ilícita reseñada permite presumir que quienes habrían participado en los hechos cuentan con los medios y/o vínculos para eludir la aplicación de la ley penal”.

La resolución del juez de Lomas de Zamora no explicó en detalle cuáles podían ser los “riesgos procesales” que justificaran la restricción de la libertad. Pero según pudo establecer Tiempo, de las “discretas tareas de vigilancia” que ordenó el juez en los días previos a disponer los arrestos detectó “movimientos” que hacían suponer que algunos de los imputados -entre ellos la ex secretaria de Documentación, Susana Martinengo- planeaban mudar su residencia habitual.

El lunes por la noche, el juez dispuso seguimientos a tres ex agentes de la AFI: Jorge Sáez, Leandro Araque y Facundo Melo. Esta mañana, cuando una comisión de la Policía Federal fue a detener a Melo, no lo encontró en su domicilio. El ex agente se presentó voluntariamente en Lomas de Zamora unas horas después, cuando supo que había una orden de arresto en su contra.

El juez evaluó además el hallazgo de una fotografía en un teléfono de un integrante del grupo de Whatsapp “Super Mario Bross” en la que se ve el artefacto explosivo que fue colocado en la puerta de la casa del ex subsecretario de Asuntos Internacionales del Ministerio de Defensa José Luis Vila, sobre la avenida Callao al 1.200, de esta Capital.

Según la metadata de esa fotografía, fue tomada varios días antes de que se produjera el atentado, lo cual no sólo es prueba indiciaria d la participación en el hecho sino de la habilidad para manipular explosivos, lo que –a criterio del juez- encierra una de las razones de los “riesgos procesales”.

Villena indagará a todos los detenidos entre mañana y el jueves, según lo que establece el Código Procesal Penal. En las próximas horas, además, el magistrado deberá resolver un pedido de exención de prisión de Darío Nieto, el secretario del ex presidente Mauricio Macri. El pronóstico es negativo para los intereses del imputado, quien fue allanado el jueves pasado.

Según Villena, los detenidos hoy, en virtud de “su expertise podrían entorpecer el desarrollo del proceso mediante la alteración de elementos de prueba o utilizar sus influencias para sustraerse de sus obligaciones”. “Mantendrían vínculos con personal de distintas fuerzas de seguridad y sujetos aun no individualizados, que podrían facilitar su injerencia para frustrar la pesquisa”, indicó el juez. Además, “disponen de recursos que podrían generar un riesgo cierto de intimidación hacia las víctimas o a los testigos, sea por sí, o por terceros”.