«Cuando visite los centros de jubilados, me encontré abuelos de 80 años aprendiendo taichí e informática y nunca habían agarrado una computadora. Después tuvimos algunos problemas porque tuvimos que cancelar cuentas porno porque batían récord de pornografía», ironizó el presidente Mauricio Macri e hizo sonrojar hasta el propio ministro de Modernización Andrés Ibarra.

Claro, que no es la primera vez que el Presidente hace gala de ese fino sentido del humor.  En septiembre de 2016 paseó su fino humor por Estados Unidos, aunque la fina ironía no tuvo la respuesta que se esperaba.

En aquella gira por  Nuevo York Macri tuvo un encuentro con el su par ruso Vladimir Putin y en tono de broma le dijo que Argentina dará el batacazo con Lionel Messi y ganará el Mundial de fútbol que Rusia organizará en 2018. El mandatario ruso no tuvo ni la gentileza de esbozar una sonrisa, lo miró serio y le preguntó, a través del traductor, si lo estaba cargando.

Durante la misma gira antes de participar de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas, Macri fue parte de la reunión de la Clinton Global Initiative. Allí, en medio del apoyo a la candidatura de Hillary Clinton donde estaba presente su marido, Bill Clinton, el mandatario también se despachó con otra humorada brillante que tampoco tuvo buena respuesta de los presentes.

Al comenzar su exposición, el primer ministro de Italia, Matteo Renzi, bromeó con Clinton, al señalarle: «Mi mujer lo espera en Italia como primer caballero durante el G7», la cumbre mundial que se realizará el año próximo en la isla italiana de Sicilia. Macri no se quiso quedar atrás y se despachó con un: «Y mi mujer Juliana Awada lo espera como primer caballero en el G20 en Buenos Aires».

Convencido de que el humor es su fuerte, Macri en medio de esa charla volvió a hacer un chiste pero en este caso el tópico fue la relación entre Argentina e Ingaterra. El chascarrillo presidencial fue dirigido al alcalde de Londres, Sadiq Khan. En la charla junto a Clinton y Renzi, Macri le dijo al ex presidente de EE.UU. con acento hispanoparlante: «Gracias por invitarme de nuevo. Matteo y yo vinimos antes como alcaldes, así que le quiero avisar al alcalde Khan que todo lo que le viene por delante es mucho más difícil». Aunque parezca extraño en este caso tampoco nadie se rió.

La tónica hilarante del Presidente también se puso de manifiesto en su visita a Roma. Luego de tener un encuentro con el Papa, Macri brindó una conferencia de presa y ahí al referirse al complica proceso de paz que vivía Colombia banalizó la cuestión y afirmó en su característico tono jocoso: “Lo que me dijo (el Papa) es que los colombianos antes que nada nos van a dejar ganar el partido de eliminatorias”.

Unos meses antes en Davos ya había ensayado la humorada aunque la respuesta tampoco había sido buena. En ese entonces, también consultado sobre el proceso de paz Macri dijo: “Queres ayudar en lo que podemos(…)a mí me une un enorme afecto porque  la seria ganadora de Boca Juniors estuvo basada en Bermúdez, Serna y Córdoba”.