Tras la sanción del Presupuesto 2021, el gobierno de Axel Kicillof busca cerrar ahora la discusión salarial del año con los trabajadores estatales. En diálogo con Tiempo, la ministra de Trabajo, Mara Ruiz Malec, habla de esa negociación y de la que vendrá en 2021. Este año, los estatales de la Ley 10.430 acordaron una suba promedio de más del 31% , los docentes del 32,6% y los médicos del 35,6 por ciento. “Hay que reparar la pérdida de los últimos cuatro años, y se empieza por los de más abajo”, sostiene, y adelanta que la inflación del 32% proyectada para 2021 será el “piso” de la paritaria del año que viene. También se refiere a la lenta recuperación del empleo y de las elecciones de medio término: “Esperemos que la oposición tenga una actitud responsable”.

¿Van a convocar a los estatales para definir el último aumento del año?

–La idea es reunirnos en los próximos días antes de que termine el año. Ya nos juntamos la semana pasada para informarles a los gremios la metodología que el Ministerio de Hacienda está pensando para este tramo final en términos de ir pasando parte de los 4000 pesos que se dieron a principios de año, de favorecer a los básicos, de apuntar a la calidad del salario.

–¿Habrá una inyección de plata “nueva”?

–En realidad, al hacer un traspaso (de sumas), ya impacta en todas las bonificaciones y en la antigüedad, es decir que sería efectivamente un aumento. Probablemente, haya también una inyección de plata nueva. Los gremios solicitaron además una recategorización adicional que evaluará Hacienda.

¿Con los docentes ya vuelven a negociar en febrero?

En principio, cerramos para encontrarnos en febrero, aunque con un compromiso de seguir monitoreando los salarios respecto de la inflación (NdeR: el índice anual se conocerá en enero). Si hubiera un desfasaje muy grande se volverá a trabajar, pero si no, nos encontraremos en febrero y conversaremos ya con perspectivas a 2021.

–El objetivo de los gremios era no quedar abajo de la inflación. ¿Se va a cumplir?

–En lo que es la Ley 10.430, el promedio de la suba es de poco más del 31%. Creo que vamos a estar muy cerca de la inflación y que va a haber sectores –los de menor salario– que van a quedar por encima. Esto es en parte por el impacto que tuvieron los 4000 pesos de principios de año y también porque se tocaron algunas bonificaciones, como es el caso de los auxiliares docentes. Hay una situación medio dispar pero hay muchos trabajadores, sobre todo los que menos tienen y en el caso del personal de la Salud, que van a ganarle a la inflación este año. Hay que reparar la pérdida de los últimos cuatro años y se empieza por los de más abajo, lo que tiene bastante sentido.

–El Presupuesto 2021 prevé una suba del 32% del gasto salarial. ¿Ese será el techo de la negociación?

–El incremento se define en la paritaria, no obstante, como en todo presupuesto, uno tiene que hacer una previsión de gasto salarial. Se hace una proyección para que cierren los números y presentar un proyecto que sea serio, pero nunca el Presupuesto puede marcar la pauta salarial, eso se define en paritarias y se deberá ajustar el Presupuesto a esa pauta. Para que esos ajustes no sean tan distintos de lo que votó la Legislatura, se intentó mandar lo que nosotros entendemos que va a ser el piso que tendremos en 2021 y que es la inflación proyectada.

¿Cómo será la reactivación del empleo tras la pandemia?

–La situación es compleja. Sabemos que el tercer trimestre mejoró, se elevó la tasa de empleo y es un poco lo que esperábamos. Lo que pasó en esta pandemia es que mucha gente dejó de trabajar, independientemente de si se consideraba desocupada o no, y sobre todo en el sector informal dejó de tener un ingreso, no porque se haya perdido la relación laboral sino porque no podía ejercer su tarea por la pandemia. A medida que se fueron flexibilizando las medidas sanitarias, muchos empleos se recuperaron pero hay sectores donde todavía falta. En el caso del empleo formal, vemos que se destruyó relativamente poco para la magnitud de la crisis económica por la prohibición de despidos y los ATP que contuvieron la situación. Creemos que con la vacuna y, si todo sale bien, en el primer trimestre de 2021 deberíamos tener mejores resultados pero nos va a llevar un tiempo reconstruir esto y realmente el diagnóstico de lo que nos deja la pandemia lo vamos a saber cuando se termine. No sabemos cuántos de esos puestos de trabajo van a volver y habrá que trabajar para crear nuevos.

–¿Cómo fue la relación con la oposición a lo largo del año?

–El año pasado se ganó una elección por un porcentaje muy amplio y eso muestra que hay una mayoría muy importante que quería un cambio en las prioridades de gestión y eso me parece que, de a poco, empieza a ser reconocido por los intendentes de la oposición. También el gobierno hizo un esfuerzo muy grande por ser justo en la distribución de la ayuda. Se habló mucho de “discrminación” y, cuando uno va a los números, eso no se observa; lo que se ve es que se usaron criterios lo más objetivos y transparentes posible, y creo que muchos lo reconocen. Y en este sentido esperamos que el año que viene haya una actitud responsable, como la que se tuvo con este Presupuesto, y no dejar que la contienda electoral gane nuestra necesidad de gestionar para los bonaerenses en cualquier partido que estemos. El gobierno provincial va a seguir trabajando como hasta ahora. Esperamos lo mismo de la oposición.

–¿Cómo ve al Frente de Todos de cara a las elecciones?

Lo veo bien, creo que la unidad es incuestionable y hay que aprovechar esa unidad para ponernos a trabajar también en una unidad de discurso donde lo que se lleve a los bonaerenses sea la gestión tanto a nivel nacional como provincial y municipal, las obras que se están realizando, las que se comprometieron en el Presupuesto. Y en base a eso creo que no nos va a ser tan difícil convencer a quienes nos votan de que realmente hemos venido a transformar la Provincia.  «