El sol negro del codo de Fernando Andrés Sabag Montiel, fallido magnicida de Cristina Fernández de Kirchner, es un escudo de la SS que estaba en el cuartel central de la organización. También es un símbolo criptonazi y bastante usado por los usuarios afines a esa ideología en la cultura forera y chanera (4chan, 8 kun). En particular del subforo /pol. Además tenía una cruz de hierro y una representación vikinga del martillo de Thor, mjolnir. Y sí, como suele suceder, el 97% de los fanáticos de los vikingos son neonazis.

No me atrevo a decir que la mayoría de los usuarios de esos foros son nazis. En general son virgos y ya, pero sí es un foco para la circulación de, como dice Daniel Dennett, «memes peligrosos». Entre ellos el más peligroso actual es una memeplex de corte facista que involucra pasar a la acción como parte de un rizo de retroalimentación.

Esa acción generalmente es infligir violencia contra alguien, ¿cómo juega la simbología nazi en todo esto? bueno, los principales representantes de esta vertiente facista memética, digámosle, fueron Brenton Tarrant, Anders Brievik, Patrick Crusius y Payton Gendron

Los cuatro utilizaron la misma metodología: atentando, manifiesto y memes neonazis. El propio Tarrant sostuvo que «los memes hicieron más por el etnonacionalismo que todos los manifiestos». 

Brenton Tarrant representado como un santo cristiano con el sol negro en el pecho

Fernando Andres Sabag Montiel tenía tatuado el «Sol Negro», uno de los símbolos más usados entre consumidores de estos memes e incluso quienes llevaron adelante atentados ¿Sabag Montiel tiene vínculo con todo lo de arriba? poco, o posiblemente ninguno. Tiene mucha más pinta de ser un desequilibrado (un esquizo en el lenguaje de foro) que estaba fascinado con la simbología y poco más. Pero, en su caso, eso fue más que suficiente. Todo el truco de este “meme peligroso” consiste primero en exponer mediante cierto conjunto de sentido la idea de un occidente en decadencia y un pasado a rescatar. Esa operación solo puede realizarle mediante la violencia que, a su vez, es vector para que más gente sea expuesta al meme peligroso. Y así se repite una y otra vez.

El objetivo de Sabag Montiel, así como los de otros ataques que operan bajo esta modalidad, no son los de un nazi clásico (atacar a la comunidad judía o sus símbolos, por ejemplo) sino ejercer violencia directa contra quien percibe como “el mal” o los responsables de la decadencia. En este caso, CFK. Esta es una de las innovaciones del discurso neo facista. Por caso, Anders Brievik no atacó musulmanes si no a toda la dirigencia joven del partido de gobierno Noruego que sería la responsable de mantener, a futuro, la política de inmigración abierta del gobierno noruego.

Ese cóctel entre memético de símbolos, teorías etno-raciales, acción directa y deteriorada salud mental, posiblemente haya sido la parte de la causa de que hizo lo que hizo. Seguramente Sabag Montiel creía en alguna o algunas variedades de todas las teorías conspirativas políticas con base etno-racial que circulan por internet. Y se convenció a sí mismo de que tenía que actuar. 

La acción del esquizo local fue, nada más ni nada menos, que dispararle en la cabeza a la vicepresidenta de la nación y la figura política más importante de la última década. Sabiéndolo o no, Sabag Montiel operó como un agente radicalizado ¿En qué consiste esto? veamos lo que dice el propio Tarrant: 

“Elegí las armas de fuego por el efecto que tendría en el discurso público, la cobertura extra de los medios que proporcionarán y el efecto que podría tener en la política de los Estados Unidos y, por lo tanto, en la situación política del mundo. Por su segunda enmienda Estados Unidos está dividido en muchas facciones, estatales, sociales, culturales y, lo que es más importante, raciales. Con suficiente presión, el ala izquierda dentro de los Estados Unidos buscará abolir la segunda enmienda, y el ala derecha dentro de los Estados Unidos verá esto como un ataque a la libertad y a su propia libertad. Este intento de abolir derechos por parte de la izquierda resultará en una polarización dramática de la gente en los Estados Unidos y, finalmente, una fractura de los Estados Unidos en facciones culturales y raciales» 

Si bien hasta que no haya una causa judicial y una investigación, no podemos saber los motivos de Sabag Montiel en el ataque, sí podemos percibir los efectos. La fuerte polarización en la esfera pública que se va a dar a partir del fallido suceso, es parte del efecto buscado. Cualquier intento de «prohibir los discursos de odio» solo agravará el problema. La polarización también es parte del ciclo de reproducción de este conjunto memético (memeplex).

Todo este caldo memético tiene más de una ramificación. Por un lado podemos ver la variedad de imágenes que existen bajo la denominación de «fashwave» que es una amalgama entre simbología facista y estética vaporwave. El objetivo, bastante exitoso, del fashwave fue precisamente utilizar otro memeplex como el Vaporwave como vector de su propia agenda. Un complejo memético sumado a otro complejo memético. 

Pero eso no es todo, la idea de provocar una inminente guerra racial que ponga freno a la decadencia occidental, está siempre presente, bajo una popularización rudimentaria y poco ajustada de «aceleracionismo». También ideas similares circularon hace algunos años bajo el nombre de «electric boogaloo». Acá vemos como el meme fascitas continua utilizando a otros memes como vectores de difusión.

A este guiso memético en argentina tenemos que incorporar otros elementos como son el antiperonismo y sus versiones más extremas que desde tiempo inmemoriales sueñan con la aniquilación física del peronismo, terreno en el cual también incursionaron diferentes dictaduras. Desde la revolución libertadora en 1955 hasta la última dictadura cívico-militar de 1976. 

Este fascismo actual, tienen características populistas en el sentido que varias de sus ideas operan en cadenas de equivalencias, así dentro del mismo universo de sentido, al menos en argentina podemos encontrar desde preocupaciones por las restricciones a la compra de dólares al mismo nivel que consignas racistas y discursos de aniquilación total del enemigo bajo la excusa de una supuesta “libertad”. O incluso una revitalización del catolicismo tradicional como una respuesta a la percibida decadencia actual . 

Por el efecto capilar de internet era inevitable que este tipo de ideas hagan mella en Argentina. Si llegaron los Bagels, los brunch, los latte macchiatos, las series, la cancelación, la corrección política ¿por qué no iba a llegar la violencia política en formato memético posmoderno?

Psyops and the glowing problem

El término «psy op» hace referencia a las mentadas operaciones de guerra psicológica. Estas son como bien dicen su nombre un tipo de operación especial cuyo fin no es estrictamente militar sino influenciar las mentes de una determinada población. Como marketing con objetivos militares. Bueno, básicamente el marketing. 

El término adquiere nuevas dimensiones a partir de la existencia de las redes sociales e internet y la posibilidad de las potencias de efectuar este tipo de operaciones pero a nivel global. 

No es casualidad que estos ataques y estas ideas se esparzan por todo el mundo con bastante similitud. De mínima es sospechoso. Ante esto nos quedan para tomar dos o tres posiciones. La primera, que es la «conspirativa» y es la que sostiene que todo esto es parte de un plan del FBI, la CIA o la NSA para cambiar el rumbo de la narrativa política occidental. 

Por medio de estos «ataques» la población estaría más dispuesta a ceder libertades individuales y derechos civiles a cambio de seguridad. La versión actualizada del “9/11 was an inside job». También es cierto lo fuertemente monitoreado que está 4chan e incluso Twitter, y que muchos de los atacantes tenían sus perfiles creados en oficinas del FBI. O bien el FBI deja actuar a los tiradores o bien directamente los incita. Es por eso que muchos usuarios de los foros se refieren a estos como «glowing ones«, una jerga para referirse a posibles «falsas banderas».

Clásico meme que representa la intervención del discurso de internet por parte de agencias de inteligencia

En el plano local, esta hipótesis debería sostener que este ataque fue efectivamente una puesta en escena del propio kirchnerismo para tener una excusa y un chivo expiatorio (los libertarios, la derecha) e instalar un gobierno de corte autoritario. Es muy probable que este discurso sea adoptado por los propios libertarios y otro tipo de disidentes de derecha.

El otro punto de vista es que este fenómeno es completamente espontáneo, no orquestado, y que es síntoma de un malestar social general, una fuerte radicalización política como efecto secundario de la etapa neoliberal y posmoderna en la que estamos sumergidos. Es decir, que la radicalización de la derecha facista a nivel mundial es producto de la «estructura». 

Por último, podemos pensar en una especie de tercera posición. Es decir, que estos ataque sí son productos de un auge global del facismo producto de la época en la que nos toca vivir, pero que eventualmente existe un fogoneo y aprovechamiento de estos casos con fines políticos por organizaciones tanto gubernamentales como para gubernamentales. Que no todo sea parte de una teoría conspirativa no quiere decir que a) no haya conspiraciones y b) que no haya ataques orquestados a la opinión pública tanto en nuestro territorio como a nivel global para instalar agendas y narrativas.

Conclusiones

Como sea, todo este mambo que hace apenas unos años nos parecía absurdo y lejano, hoy ya se encuentra entre nosotros y se manifestó de la peor manera posible. Por eso mismo es preciso que se tomen cartas en el asunto y no pueden ser medidas superestructurales del tipo «prohibir discurso de odio» que posiblemente sea la peor alternativa posible. Lo principal es que este episodio de violencia sea modelo para otros episodios similares.

Siguiendo la metáfora del meme, lo que es necesario es crear anticuerpos contra esta familia de memes peligrosos. Es decir, dar herramientas político/cognitivas a cada persona para poder desarmar esta lógica. Sí, es necesario dar la batalla memética, en todos los frentes.

Este texto fue publicado originalmente el 2 de septiembre de 2022, al día siguiente del atentado contra CFK, en el blog leer, escribir, ejecutar