Durante una entrevista en 2008, tras desempeñarse en un tribunal internacional sobre el genocidio de Ruanda, Inés Weinberg de Roca, la candidata a Procuradora general impulsada por el presidente Mauricio Macri, se refirió a los juicios por delitos de lesa humanidad en nuestro país.

“Tengo la sensación que (en el caso de Ruanda) se trata de justicia para un solo lado, no tan diferente a la justicia en casa, al fin de cuentas, pero en Argentina también hubo justicia para un solo lado, y eso no está bien”, señaló la jueza en una entrevista realizada por Voices of Rwanda.

La declaración fue revelada por el diario Perfil, que le pidió una aclaración sobre la frase, pero la jueza eligió no responder hasta que enfrente las impugnaciones en audiencia pública a principios de mayo.

Este tema será uno de los cuestionamientos de la oposición pero no será el único. Por su paso por la ONU, el ex legislador porteño Rafael Gentili, de Proyecto Sur, dio a conocer que cobró durante 3 años de trabajo más de 180.000 dólares mientras cobraba su sueldo de camarista en el fuero local, algo prohibido con la única excepción de ejercer cargos docentes. Además, no figuran en la declaración jurada de la magistrada.

La líder del GEN, Margarita Stolbizer, ya cuestionó su rol como miembro del Consejo Asesor del Centro de Desarrollo Económico de la Mujer, dependiente del Ministerio de la Producción, cargo para el cual fue designada directamente por el Poder Ejecutivo, lo que pone en duda su independencia.

A esto se sumarán también los cuestionamientos por sus fallos como titular del Tribunal Superior de Justicia porteño, desde donde habilitó a la Policía Metropolitana a utilizar las pistolas Taser o a pedir DNI sin motivos.