La Jefatura de Gabinete que encabeza Marcos Peña se quedó con el control del sistema de contrataciones y concesiones de la obra pública de la Administración Nacional que, hasta ahora, estaba bajo la órbita del ministro del Interior, Rogelio Frigerio.

La medida que amplía el poder de la Jefatura de Gabinete fue adoptada a través del Decreto 1169/2018 y publicada hoy en el Boletín Oficial.  

El Poder Ejecutivo justificó el cambio en el objetivo de “atenuar el riesgo de que haya una mala administración, sobrecostos y corrupción que tanto han azotado a la República Argentina, obstaculizando, con ello, su desarrollo económico”.

De esta manera, el gobierno de Mauricio Macri centralizará las contrataciones en el despacho de Peña para “disuadir conductas disvaliosas por parte de los actores del sistema”.

“Resulta conveniente establecer un régimen de sanciones adecuado, proporcional y gradual con el objetivo de disuadir y penalizar conductas disvaliosas por parte de los actores del sistema”, abundó el decreto.

Macri decidió que la Oficina Nacional de Contrataciones dependa de Peña para controlar el régimen de obra pública, lo que implica que asumirá las competencias que antes tenía la Subsecretaría de Coordinación de Obra Pública Federal, dependiente de Frigerio.

El organismo tendrá a su cargo, además, el funcionamiento del Registro Nacional de Constructores que trabajan con el Estado. Las contrataciones y concesiones de obra pública cuya ejecución se haya iniciado antes del 29 de diciembre de 2016 deberán ser incorporadas al sistema electrónico de la plataforma Contrat.Ar, y la implementación no podrá extenderse más allá de septiembre de 2019, según se especificó en el decreto publicado este miércoles.

La plataforma de gestión electrónica Contrat.Ar se utilizará para contratar y realizar el seguimiento de la obra pública. Además, según el decreto, esta plataforma deberá iniciar un plan de apertura de sus datos.