Miles de personas convocadas por el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia, junto con otras organizaciones políticas, sociales y gremiales marcharon desde Plaza Congreso hasta Plaza de Mayo en reclamo de la liberación de los detenidos durante la represión del 18 de diciembre, mientras se trataba en la Cámara de Diputados la Reforma Previsional, y para repudiar las prisiones domiciliarias concedidas a los condenados por delitos de lesa humanidad.

«La política represiva del gobierno incluye el avance de la impunidad con la prisión domiciliaria a Etchecolatz y decenas de genocidas condenados, el ascenso del gendarme Echazú (único imputado por el asesinato de Santiago Maldonado), y un avance en la represión y criminalización de la protesta social, para imponer un durísimo ajuste contra los trabajadores y el pueblo. El mensaje de disciplinamiento que pretende dar el Gobierno Nacional es tan brutal que a través del Ministerio de Seguridad ha denunciado a los diputados que se opusieron a tratar la Reforma Previsional el 14 de diciembre”, expresaron desde Memoria, Verdad y Justicia en un documento.

Los detenidos todavía son siete y están en distintas cárceles. Dos de ellos son militantes del Partido Obrero. «César Arakaki y Ponce Dimas son víctimas de un intento de criminalizar la movilización popular. Estamos frente a una causa con un carátula armada solamente para impedir la excarcelación y con detenidos al azar», señaló Marcelo Ramal, dirigente del PO.

«Los compañeros detenidos son verdaderos presos políticos de Macri y su Justicia cómplice», concluyeron los organizadores de la marcha.