La fractura está expuesta entre el presidente del Bloque Justicialista, Miguel Ángel Pichetto y el vice, José Mayans. Más allá del cocoreo en la reunión de comisión que sacó dictamen para debatir el Presupuesto, la interlocución con los gobernadores que reclaman por el fondo sojero y la posición frente al presupuesto dividen al bloque que se supone representa a los mandatarios peronistas.

Mayans y Beatriz Mikin, senadora tucumana vicepresidenta de la reunión de Presupuesto, son los que le reclaman a Pichetto reuniones de bloque para tratar la ley de leyes. “Hay disconformidad por el trato, el presupuesto es un tema fundamental para tratar en reunión de bloque, es la planificación de lo que va a venir. En las provincias vamos a perder el subsidio eléctrico, el Fonavi, el incentivo docente,  los subsidios al combustible y a los servicios”, se quejó Mayans en diálogo con Tiempo.

Es que la reunión que tuvo Pichetto con Frigerio el lunes en el Senado levantó sospechas de sus pares de bloque. Luego del encuentro, el oficialismo se jactó de tener garantizada la sesión especial para el miércoles 14, donde se aprobaría el Presupuesto 2019, pero se excluiría el tratamiento sobre tablas del proyecto que anula el decreto de Mauricio Macri que les quitó el Fondo Sojero a las provincias.

El llamado a sesión especial -con temario acotado- puede hacerse por labor parlamentaria y se debe votar en el recinto. Los senadores díscolos del PJ especulan con que si el oficialismo dice tener los números es porque acordaron con Pichetto el bloqueo del tratamiento del fondo sojero. “Miguel va a seguir con la estrategia del silencio hasta una hora antes de la sesión”, se quejó Mayans.

Por lo pronto, los senadores que no votarán acorde al deseo de Pichetto son el propio Mayans, Mirkin, Alfredo Luenzo, Norma Durango, José Alperovich, María Teresa González, Daniel Lovera y Omar Perotti. Si bien el correntino Carlos “Camau” Espínola firmó el dictamen, lo hizo en disidencia y confirmó su postura en contra del proyecto.