Con fotos impresas del rostro de la militante política jujeña, producto de la mirada del fotógrafo Sebastián Miquel, se busca generar una identificación: todos somos Milagro, porque es una presa política, porque fue perseguida y apresada, porque esta vez le pasó a ella, pero mañana puede pasarle a cualquiera. En un país donde las garantías constitucionales son ignoradas por el poder político no queda otra opción que luchar junto a nuestro pueblo.