El presidente Mauricio Macri pegará el faltazo a la inauguración del período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas. Si bien, desde el gobierno aseguraron que la ausencia se debe a los problemas de la rodilla del presidente, durante su mandato el país recibió las críticas de la ONU, cuyo grupo de trabajo sobre detenciones arbitrarias pidió en octubre pasado la liberación «de inmediato» de Milagro Sala. A esto se suma que el Comité Contra la Desaparición Forzada del organismo exigió “la acción urgente del estado argentino para encontrar a Santiago Maldonado”.

El Comité contra la Desaparición Forzada de las Naciones Unidas consideró el 8 de agosto que la desaparición de Santiago Maldonado exige “la acción urgente del Estado parte para buscarle y localizarle”.

Es la primera vez que un presidente argentino se ausenta de la apertura del principal órgano deliberativo de la ONU desde que Eduardo Duhalde faltó debido a la crisis política que vivía el país en 2002.

En lugar de Macri, que según explicaron desde Casa Rosada se repone de una cirugía en la rodilla derecha, concurrirá la vicepresidenta Gabriela Michetti quien encabezará la comitiva oficial argentina que participará desde el 12 de septiembre en Nueva York del 72° período ordinario de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas.

Fuentes de la Casa Rosada expresaron además que hay en carpeta decenas de pedidos de visitas al exterior (Europa y Asia encabezan la lista) que el gobierno no ha podido responder hasta ahora, y que la agenda de viajes volverá a activarse bajo el criterio de lograr los mejores acuerdos comerciales para vender los productos argentinos en el mundo y captar inversiones que permitan abrir nuevas fuentes de trabajo.

Michetti viajará a Nueva York acompañada por el canciller Jorge Faurie y por el secretario de Asuntos Estratégicos, Fulvio Pompeo, entre otros funcionarios.

Macri sí fue en 2016, cuando participó por primera vez como jefe de Estado argentino en la Asamblea General de la ONU, considerada la mayor cumbre diplomática global, Macri destacó la «agenda moderna, contemporánea» de la Argentina.