La derrota del domingo y la delirante lectura política por parte del presidente Mauricio Macri, el martes comenzó una ofensiva twittera con el hashtag #FraudeK que antes del mediodía intentaba ser tendencia en esa red social a través de cuentas reales y cuentas de trolls.  

El hashtag que llegó al mediodía a 50 mil tweets, y tuvo especial sintonía con el discurso del miedo que el gobierno busca imponer, iban acompañados en algunos casos con fotografías de telegramas de distintas mesas electorales. Las denuncias giraban en torno al faltante de votos durante el escrutinio o votos diferentes entre sí. También se denunció que en algunos casos la faja de la urna estaba violentada.

La campaña de trolls y seguidores surge a pesar de que el ministro del interior, Rogelio Frigerio, a menos de 24 horas de las elecciones anticipó que “iban a ser las elecciones más transparentes de la historia”, y a pesar de que el poder ejecutivo es quien está a cargo del conteo de los votos. Además, quince días antes de las elecciones, la Cámara Nacional Electoral fijó pautas para asegurar la transparencia en las elecciones.

Sumado al twitteo del fraude, también a través de la red social, se convoca a una marcha para el 21 de septiembre para “defender la nación” y a cacerolazos desde el viernes.