Un acto de reconocimiento al Papa Francisco convocado por el arzobispo de La Plata, Víctor Manuel «Tucho» Fernández, reunió este jueves a políticos de un lado y otro de la grieta en la Catedral de La Plata. El gobernador Axel Kicillof y los intendentes de La Plata, Julio Garro; de Berisso, Fabián Cagliardi, y de Ensenada, Mario Secco, junto a ministros y legisladores participaron del evento en el que hubo un nuevo pedido a la clase política para revertir la pobreza en nuestro país.

La ceremonia fue organizada por el monseñor Fernández en homenaje a los 10 años de Jorge Bergoglio como Papa, que se cumplirán en marzo del año que viene, y se centró en revalorizar su mensaje social y las enseñanzas de sus dos encíclicas, Laudato si y Fratelli tutti. Con este objetivo, el religioso celebró ya en el arranque el «collage» que logró su convocatoria que fue seguida incluso desde las afueras de la Catedral por vecinos y trabajadores de distintos gremios. «Tuve mis vacilaciones al organizarlo, pero está claro que Francisco trasciende el catolicismo y tiene un significado para todo el mundo», aclaró al explicar el por qué del acto.

Papa Francisco
Foto: Gobernación de la Provincia de Buenos Aires

El arzobispo destacó la austeridad personal de Francisco y los gestos de ayuda en distintos puntos del mundo antes de pedirle a todos los presentes que tomen su ejemplo. «Más allá de las diferencias que podamos tener con Francisco en algunos temas, los argentinos no podemos dejar de reconocer una cosa: que uno de los nuestros se ha convertido en un ícono mundial, en una figura a la cual el mundo presta atención, en una figura significativa como pocas», señaló y advirtió a los políticos: «Lo mejor que podemos hacer en este acto es recoger un poquito de su mensaje».

El mensaje del Papa Francisco

Luego se dedicó a sintetizar las encíclicas sociales, «Laudato si» y «Fratelli tutti», repasando los ejes de que atraviesan cada documento y explicando cómo deberían aplicarse en la región del Gran La Plata, con especial énfasis en la contaminación ambiental, la pobreza y la dignidad humana.

«El deterioro del ambiente y de la sociedad afectan de un modo especial a los más débiles del planeta. Un verdadero planteo ecológico se convierte siempre en un planteo social», advirtió el monseñor parafraseando al Papa y puso el foco en la pobreza, luego de que el INDEC diera a conocer que llegó al 36,5% en el primer semestre del año. «El pobre que la pasa mal no está acá, no están a la vista y por eso creemos a veces que no existen. Seguimos tolerando que haya unos más dignos que otros como si hubieran nacido ya con mayores derechos».

En otro tramo del acto, también realizó un llamado a la unidad en los términos en que lo plantea la encíclica «Fratelli tutti» . «El amor político se expresa en la apertura a todos, en que tengan todos un espacio», señaló y explicó que el documento de Francisco «invita también en nuestro país a la cultura del encuentro y la amistad social, a un diálogo que respete las diferencias pero sea capaz de encontrar puntos de contacto para el bien común».

El evento contó también con la participación del investigador del medioambiente de la UNLP, Atilio Porta, quien ofreció su mirada sobre el medio ambiente y la contaminación, y también la intervención de la rectora de la UCALP, Rita Gajate; y el titular del Observatorio Socio Económico de esa universidad, Rodrigo Martín, quienes presentaron los números del Observatorio Socioeconómico sobre la pobreza en el Gran La Plata. Con gráficos, los especialistas le pusieron números a la pobreza en presencia de las autoridades locales: aseguraron que existen 261 asentamientos en los que habitan más de 200 mil personas.

En el final, el Arzobispo pidió un aplauso cerrado para el Papa Francisco. «Viva la Patria. Viva Francisco», cerró en medio de una ovación.

Las primeras filas de la Catedral fueron ocupadas por funcionarios nacionales, provinciales y locales tanto del Frente de Todos como de Juntos. Junto a Kicillof se ubicaron los ministros de Justicia, Julio Alak; la ministra de Gobierno, Cristina Álvarez Rodríguez, el jefe de Asesores del Gobernador, Carlos Bianco, y la presidenta del Instituto Cultural, Florencia Saintout. También estuvieron la ministra de las Mujeres, Estela Díaz; su par de Ambiente, Daniela Vilar, y de Trabajo, Walter Correa. En el mismo sector se sentaron el diputado nacional del Frente de Todos, Eduardo Valdés, y el titular de la Fundación La Alameda, Gustavo Vera.

En otra fila de bancos se ubicaron el intendente Garro y parte de su gabinete; el presidente de la UNLP, Martín López Armengol; legisladores provinciales de Juntos por La Plata, Julieta Quintero, Fabián Perechodnik y Florencia Barcia, y concejales también del oficialismo local.

EL ATENTADO A CFK

En ronda de prensa, tras el acto, Tucho Fernández habló de la convocatoria antigrieta y aseguró que la presencia de oficialistas y opositores en ese templo «es un signo de que se puede hacer juntos, incluso cosas más importante que este acto que son los problemas de la gente y no se arreglan con un solo color. Es ponerse todos en una mesa y darle todos para adelante».

También habló del inteno de magnicidio contra la vicepresidenta Cristina Kirchner ocurrido el pasado 1° de septiembre. Calificó el hecho como «terrible y angustiante» y aseguró que el Papa está «muy preocupado» por lo que pasó. «No tenemos conciencia, no nos estamos dando cuenta de la enorme gravedad que tiene porque si pudo llegar a pasar esto, si ya se saltó ese límite, preparémonos porque lo que viene puede ser muy jodido», señaló y contó que muchos amigos de otros países lo llamaron incrédulos de que en Argentina pudiera pasar un ataque de este tipo.

En el final, ante la consulta de Tiempo, también se refirió a la posibilidad de que el Papa Francisco visite nuestro país. «Sé que hay mucha gente a la que le duele que no venga. No es fácil. A España, que es el gran país católico, no fue. Hay muchos países sumamente importantes para la Iglesia y no ha ido. Él opta por ir a Kazajistán, donde hay mil católicos, y elige ir allí porque dice que a esa gente nadie los visitó», explicó. «No veo tan fácil que venga, él dice allí estuve toda mi vida, ya hice todo mi aporte. Y encima está más debil por la edad, por eso no lo veo fácil», cerró.