Juristas, funcionarios judiciales, abogados y referentes de organismos vinculados con la problemática de los tribunales protagonizarán este lunes un debate sobre uno de los poderes del Estado que aparece en constante tensión entre distintos proyectos políticos y particulares, y es hoy una de las instituciones con peor imagen pública.

Organizada por Tiempo Argentino, el Sindicato de Trabajadores Judiciales de la República Argentina (SiTraJuRA) y el Centro Cultural de la Cooperación (CCC), la jornada «Tiempo de Pensar la Justicia» se realizará mañana, 25 de noviembre, a las 17, en el Centro Cultural de la Cooperación.

A través de dos paneles, se abordarán las experiencias sobre el acceso a la Justicia, los modelos en tensión y los desafíos para transformarla y acercarla al pueblo. La actividad será transmitida vía streaming en la página <www.tiempoar.com.ar >, ya que la capacidad de la sala se colmó en la inscripción previa.

La extitular de la Procuración General de la Nación, Alejandra Gils Carbó, el juez de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo Roberto Pompa, la directora del Área de Justicia y Seguridad del Cels, Paula Litvachky, y Gonzalo Semería, abogado y asistente del Departamento de Derechos Humanos del CCC, debatirán sobre «Derechos Vulnerados y Desigualdades: pensando una Justicia para todes». Será de 17:15 a 19 horas en la sala Osvaldo Pugliese, ubicada en la planta baja del Centro Cultural de avenida Corrientes 1543.

Y a partir de las 19:30, la abogada Graciana Peñafort, el procurador fiscal ante la Corte Suprema, Víctor Abramovich, y la diputada nacional  Josefina González reflexionarán sobre «Una alternativa a la Justicia en manos de las élites», coordinados por Stella Segado, psicóloga social, investigadora y coordinadora del fondo documental de la Conadep.

El filósofo Darío Sztajnszrajber aportará en el inicio de la charla su mirada sobre el universo judicial y el director del CCC, Juan Carlos Junio, dará la bienvenida al público.

El rol que ocupó la administración de justicia durante los últimos años en la definición de la agenda pública, y en conjunto con los principales espacios de poder, para generar hechos de alto impacto y procesos que condicionaron a dirigentes de espacios opositores y organizaciones sociales, indican que es urgente pensar la Justicia que viene.

El próximo cambio de gobierno pone nuevamente al frente el debate no solamente sobre el denominado lawfare y sus protagonistas judiciales, sino la posibilidad de plantear reformas estructurales que eviten volver a prácticas que solamente sirvieron a intereses por lo general alejados de las necesidades de la sociedad. «