Mientras el empresario ruralista, Luis Miguel Etchevehere, se alista para asumir en los próximos días como ministro de Agroindustria de la Nación, el gobierno anunció que los exportadores de granos ya no tienen obligación de liquidar en el mercado cambiario los dólares que obtenían como resultado de sus ventas al exterior.

En rigor, esa obligación había sido flexibilizada desde la llegada del gobierno de Cambiemos en diciembre de 2015. Desde 2001 regía una disposición que establecía un plazo de 30 días para colocar esas divisas en el mercado pero en enero de 2016 el plazo se amplió a 5 años y en los primeros días de este año se volvió a prolongar hasta diez años.

Sin embargo, la decisión del gobierno de Mauricio Macri pone de hecho la política cambiaria en manos de las grandes corporaciones del sector agrícola y agroindustrial, que desde ahora contará con libertad total para disponer de las divisas que antes administraban las autoridades para equilibrar el tipo de cambio.

Aunque prevaleció la demanda de reserva, la novedad generó opiniones contradictorias. Por un lado están los empresarios y analistas que aplaudieron la medida y la pusieron en la misma línea que el levantamiento de las retenciones a las exportaciones de granos, que fue una de las primeras medidas del gobierno macrista junto con la eliminación del llamado “cepo cambiario”.

Pero otros advirtieron que la medida le da un enorme poder a las empresas exportadoras en una economía altamente sensible a los vaivenes de la moneda estadounidense como la argentina y advierten por un posible impacto en el tipo de cambio y, por añadidura, en la conformación de los precios minoristas y en el poder adquisitivo del salario.

La disposición se oficializó mediante el decreto 893/2017, que se publicó hoy en el Boletín Oficial, con firmas del presidente Macri; del jefe de Gabinete, Marcos Peña; y del ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne.

El decreto elimina el artículo 1° del decreto 2581/64 que establecía que “el contravalor en divisas de la exportación de productos nacionales debe ingresarse al país y negociarse en el mercado único de cambio dentro de los plazos que establezca la reglamentación pertinente”.

En el texto, el gobierno argumentó que “resulta pertinente adecuar la normativa vigente relacionada con el mercado de cambios a las nuevas circunstancias que se dan en la materia, a fin de mejorar la competitividad de las exportaciones argentinas, flexibilizar las condiciones de financiamiento y mejorar la previsibilidad financiera”.

Según datos oficiales, hasta la semana pasada el ingreso de divisas producto de la exportación de granos registró US$ 18.791 millones, una cifra 10% menor a la que se declaró en el mismo período de 2016.