El Senado dará inicio al tratamiento de la reforma al Consejo de la Magistratura este martes en un plenario en el que participarán las comisiones de Asuntos Constitucionales y Justicia. Superada la instancia del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, se viene otra ley que volverá a dividir las aguas en el bloque oficialista. 

La reunión será a las 16 horas y se pondrán en debate, además del proyecto del Poder Ejecutivo, otras iniciativas presentadas por cinco senadores: Alfredo Cornejo, Silvia Giacoppo, Eduardo Vischi, Alberto Weretilneck y Nora del Valle Giménez.

La Comisión de Asuntos Constitucionales, que será la cabecera, está presidida por el jujeño Guillermo Snopek, mientras que el kirchnerista Oscar Parrilli continúa al frente de la Comisión de Justicia. Según pudo saber Tiempo, se buscará acelerar el debate ya que el Parlamento tiene un plazo decisivo hasta el 15 de abril, según dispuso la Corte Suprema de Justicia en diciembre pasado. De ser aprobado, la iniciativa tiene que girar a Diputados, donde se abren nuevas negociaciones. 

El máximo tribunal declaró inconstitucional la ley vigente de 2006, que se aprobó durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y ordenó al Congreso sancionar una nueva norma o, de no haber acuerdo, se volverá una composición del Consejo de la Magistratura de 20 miembros. Por lo que, si no hay nueva ley, se deben elegir siete nuevos miembros, ya que, según la Corte, la composición actual de 13 miembros no respeta el equilibrio de los sectores que seleccionan.

Luego de la postura dividida en el bloque del Frente de Todos, que se cristalizó a la hora de votar a favor del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional el jueves pasado, en el tema judicial se vienen otras diferencias entre el kirchnerismo y los peronistas que deciden defender el proyecto del Ejecutivo. 

Parrilli es un defensor de continuar con la ley vigente. Además, en diciembre pasado ya había señalado que «en el Consejo de la Magistratura tiene que existir una participación ciudadana porque sería algo que le haría bien a la democracia y evitaría el abuso del poder y las posiciones corporativas».

Por su parte, Juliana Di Tullio dijo en El Destape Radio que de ninguna manera la Corte “puede decir que derogué una ley que voté. Que el Poder Judicial me venga a decir al Legislativo qué hacer con una ley solo pasa en Argentina”. De todas maneras, señaló que hay “coincidencias” hacia adentro del bloque.

En cuanto a la oposición, Juntos por el Cambio prepara un contraproyecto que unifica las distintas iniciativas que presentaron desde el espacio político. Ya el diputado radical Mario Negri había presentado la postura en un texto de ley hace pocos meses, donde se le da mayor participación a la Corte Suprema de Justicia, sobre todo en la conducción del organismo que tiene a su cargo la administración del Poder Judicial, el control de la actividad de los jueces y la imposición de sanciones.

El proyecto del Ejecutivo

El proyecto de reforma que envió el Poder Ejecutivo amplía de 13 a 17 el número de integrantes del Consejo. La iniciativa suma un juez, dos abogados y un académico o científico. Contempla también la cuestión de género, de modo tal que al menos la mitad de los cargos deberá ser ocupada por mujeres.

Por el contrario, la composición original era de un miembro de la Corte Suprema de Justicia, que era su presidente y presidía entonces el Consejo; cuatro jueces, ocho legisladores (cuatro por cámara: dos por el oficialismo; uno por la primera minoría y uno por la segunda minoría); cuatro abogados; un representante del PEN y dos miembros del sector académico. «