El diputado bonaerense del Frente de Todos y director del Instituto de Políticas Públicas de Seguridad y Justicia (IPPESU) Matías Molle participó de la movilización del sábado para respaldar a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y padeció, como la mayor parte de la militancia y la ciudadanía reunida en las inmediaciones de la casa de CFK en Recoleta, el hostigamiento, los golpes, la represión e incluso una detención en el lugar de aproximadamente una hora por parte de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires.

En comunicación con Tiempo, este legislador oriundo del distrito de San Fernando remarcó que, más allá de su experiencia personal, quiere transmitir una serie de conceptos que le preocupan en relación al operativo policial dispuesto por el Gobierno de la Ciudad. “El operativo, en términos concretos, nunca estuvo armado para proteger nada ni nadie. Al contrario: su objetivo real fue siempre la provocación y la represión (…) Claramente no había voluntad de gestionar la conflictividad, más bien todo lo contrario: provocarla, azuzarla, potenciarla. Y televisarla. (…) La violencia, siempre desproporcionada, fue la única respuesta que tuvieron para ofrecer”, escribió Molle en su análisis personal publicado en la página de IPPESU y posteado en sus redes sociales.

“Una de las cosas que me llamó la atención fue la cantidad de efectivos jóvenes, hombres y mujeres, y lo descontrolados que estaban… después, uno lo ve también en la modulación que se escucha, que se filtra cuando hablando del gobernador Axel Kicillof como ‘un manifestante más’ o en la grabación cuando lo están violentando al diputado nacional Máximo Kirchner. Uno ve que ahí hay una direccionalidad, una toma de posición, que después se confunde”, recordó Molle a Tiempo.

“Eso no lo puedo poner el términos de ‘ellos o nosotros’. Yo quiero una democracia. Quiero que las cosas funcionen. Quiero que la formación de la Policía sea profesional. Pero cuando después ves que salen dos altos cuadros de Juntos por el Cambio, como los casos de Patricia Bullrich y Ricardo López Murphy, a decir lo que dicen, cuando Bullrich dice ‘en la seguridad no hay que tener miedo, no te podés dejar tomar la calle’, o cuando López Murphy dice ‘son ellos o nosotros’ y uno recuerda que fueron dos ministros de la Alianza, que se fueron en diciembre de 2001 con 39 muertos, uno realmente se pone a pensar, ¿en manos de quién nos quieren dejar? ¿en manos de esta gente? ¿así es como van a preparar a las fuerzas de seguridad? ¿les van a dar una ideología?”, preguntó.

“Yo los quiero profesionales. Que hagan las cosas bien. Si tienen un objetivo, que lo cumplan siendo profesionales. Pero acá pareciera que no, que era ‘ellos o nosotros’. Terminaron utilizando a la Policía de la Ciudad como un brazo ejecutor de una decisión política, en este caso de Larreta, Miguel y D’ Alessandro, pero evidentemente presionados por otras figuras de Juntos por el Cambio como Macri y Bullrich”, analizó.

Doble discurso

Molle también marcó que, más allá de los discursos más duros de “halcones” de Juntos por el Cambio como Bullrich y López Murphy, desde la administración gubernamental larretista se intenta aplicar el barniz discursivo del presunto mantenimiento de la “paz social” para apoyar este tipo de accionar policial. “Se venden como palomas, pero después te salen a pegar como si fueran unos tigres. Tienen doble discurso. Había un montón de gente grande ahí, que se había convocado de manera espontánea…cuando vos, a la manifestación, sea de quien sea, la óptica que le vas a poner para analizarla y pensarla en términos de la gestión es desde el lado de la seguridad, ya estamos errados”.

“Entonces erramos desde el vamos, porque ya estamos poniendo una manifestación pacífica, la estamos ubicando en el lugar de potencial conflictividad. Entonces, te preparás de otra manera y tus soluciones son otras. Cuando pensás que sos un martillo, todos los problemas se te presentan como clavos. Ellos se creen que son martillos, y que todos los demás somos clavos”, concluyó.