Tras conocerse el fallo del Supremo Tribunal Federal de Brasil, que aprobó un recurso para que los presos condenados en segunda instancia, como es el caso de Lula da Silva, puedan esperar en libertad la sentencia, el presidente electo Alberto Fernández celebró en redes sociales la noticia.

«El Supremo Tribunal Federal de Brasil ha decidido que las condenas a prisión solo son ejecutables una vez que hayan quedado firmes”, destacó y recordó: «Es lo mismo que venimos reclamando en Argentina desde hace años”.

“¡Valió la pena la demanda de tantos!», festejó y acompañó el texto con el hashtag #LulaLivreAmanhã, «Lula libre mañana».

Durante su campaña electoral, Alberto visitó a Lula en la cárcel y se refirió varias veces a su detención. “Tal vez Lula esté preso porque consiguió lo que nadie había conseguido en Brasil: que más de la mitad de los brasileños son parte de la clase media. Hasta entonces predominaba la pobreza y un sector chiquito concentraba la pobreza. Tal vez eso no le perdonaron a Lula, pero eso pasó en todo el continente, en Argentina, Paraguay y Bolivia”

Los reiterados pedidos de Fernández no fueron bien recibidos por el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, quien tiene de ministro de Justicia al ex juez Sergio Moro, quien llevó la investigación y encarceló al ex mandatario.

“Sí quiero dialogar (con Argentina), no vamos a cerrar las puertas. Pero estamos preocupados y recelosos, teniendo en cuenta el gesto que hizo de Lula libre (…)”, se atajó Bolsonaro luego de que Fernández venciera a Macri en las elecciones. “Es una afrenta a la democracia brasileña, al sistema judicial brasileño», se quejó.