Terminó una jornada clave que perfilará la política y la economía de la Argentina de los próximos años. Con la Presidencia y la gobernación bonaerense como las dos últimas batallas de fondo, unos 33,9 millones de argentinos fueron llamados a votar en las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) para formalizar a las candidaturas ejecutivas y legislativas para las elecciones generales del 27 de octubre. A las 18 horas, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, estimó la asistencia a las urnas en un 75% del padrón. 

Tras el cierre oficial de los comicios, a las 18 horas, se espera que los primeros datos del escrutinio provisorio se conozcan recién a partir de las 21. La información podría demorar incluso más en llegar ya que para empezar a difundir tendencias el Ministerio del Interior deberá esperar “a que se encuentre cargado el 10 por ciento de los resultados correspondientes a las mesas electorales de los distritos de Capital Federal, Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe”, los cuatro más populosos.

Esa decisión fue tomada por la jueza María Romilda Servini, a cargo del Juzgado Federal 1 con competencia electoral, a raíz de las denuncias que hubo contra la empresa Smartmatic, ganadora de la licitación para proveer el sistema a cargo de la transmisión de los telegramas con los resultados de la votación en las escuelas.

Con las fórmulas Mauricio Macri-Miguel Ángel Pichetto y Alberto Fernández-Cristina Fernández de Kirchner a la cabeza de los sondeos, se espera unas PASO hiperpolarizada entre el oficialista Juntos por el Cambio y el opositor Frente de Todos.

“Nosotros creemos en seguir con este cambio profundo en la Argentina”, dijo el presidente Mauricio Macri, quien va por su reelección al frente de la Rosada, luego de emitir su voto. “Va a ser un día de fiesta para la democracia. Espero que todos los argentinos vayan a votar y después hay que tener paciencia, porque los resultados van a estar recién después de las 9 de la noche”, señaló.

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(Foto: Télam)


“Nos genera muchas dudas la forma en que se contrató esta empresa y su funcionamiento”, advirtió, por su parte, el postulante a la Presidencia por el Frente de Todos, Alberto Fernández. Fue al referirse a SmartMatic y a las sospechas de manipulación del escrutinio provisorio. “Queremos que no se violente la voluntad popular”.

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(Foto: Prensa Frente de Todos)


De los 10 precandidatos a presidente, el primero en votar fue Roberto Lavagna (Consenso Federal), quien llamó a la ciudadanía a votar “con el corazón estrictamente lo que desea y sin ningún otro tipo de cálculo”.

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La decisión de aguardar al conteo provisorio de al menos el 10% para dar a conocer tendencias, ordenado por Servini de Cubría, surgió luego de las denuncias que recibió Smartmatic por parte de varias de las fuerzas de la oposición. Esta empresa fundada en EEUU, que por primera vez desplaza a la española Indra que tuvo a cargo esta tarea desde 1997, ofreció los valores más bajos y por eso fue elegida por el gobierno. Sin embargo, no solo registró fallas severas en las pruebas previas, sino que incumplió con el pedido de mostrar el código fuente que utiliza para que las distintas fuerzas políticas y organismos especializados pudieran fiscalizar su funcionamiento. Para colmo, su curriculum incluye denuncias por irregularidades en esta misma labor en El Salvador y Venezuela, entre otros países.

Su incidencia, es importante aclarar, no puede modificar el resultado final de la elección. Ya que eso se define por el conteo definitivo que realizará la Justicia Electoral. El problema es que eso comienza 48 horas después de las elecciones y puede tomar hasta 10 días. Demasiado para el clima electoral que se vive en el país. En especial teniendo en cuenta que los resultados de hoy definirán la campaña que a partir de mañana se recalentará de cara a las generales del 27 de Octubre. Y que la foto de esta noche será más importante que el diario de mañana.