A la espera de nuevos arrepentidos, Bonadio rechazó todos los pedidos de excarcelación

Mientras dos empresarios permanecen prófugos en la causa de los cuadernos, el fiscal Carlos Stornelli se pronunció por el rechazo de todos los pedidos de excarcelación de empresarios y ex funcionarios, medida que finalmente fue ratificada por el juez Claudio Bonadío.

Después de la presentación ante la justicia de Juan Carlos Goycoechea, el ejecutivo de la empresa Isolux que se encontraba de vacaciones, los empresarios que permanecen en calidad de prófugos son Francisco Valenti (estaría en Asia), directivo de IMPSA, y Oscar Thomas, ex director ejecutivo de Yacyretá durante el kirchnerismo.

Frente al juzgado federal 11, ubicado en el cuarto piso de los tribunales de Comodoro Py,  un puñado de abogados de grandes estudios esperaba desde temprano el pronunciamiento del magistrado.

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Entre los abogados de los defensores había bajo nivel de expectativa en torno a la posibilidad de que alguno de los imputados quedara en libertad. “Pareciera que van a buscar que aparezca otro arrepentido”, sostuvo una fuente con acceso al expediente. Tenía razón. Pasadas las 17, Bonadio resolvió que todos continúen detenidos.

Por la tarde fue trasladado a Comodoro Py una vez más Oscar Centeno, el chofer que se arrogó la confección de los libros con la información sobre las supuestas coimas.

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El traslado de Centeno fue para que el juez Bonadio lo notifique sobre la respuesta al pedido de excarcelación que presentó su defensor oficial, Gustavo Kollmann, y, a la vez, que le informe si homologará o no el acuerdo alcanzado entre el imputado y la fiscalia.

Centeno acordó con el fiscal Carlos Stornelli acogerse a la figura de imputado colaborador y ese acuerdo con una primera declaración de Centeno fue puesto a consideración de Bonadio para que decida si lo homologa. Si eso ocurre -y todo hace pensar que así será- comenzará a correr el plazo de un año para chequear la contundencia de los aportes del “arrepentido”.

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Para que Centeno logre una eventual reducción de pena, la prueba que aporte deberá servir para demostrar delitos cometidos por otros de igual o mayor jerarquía que él en la supuesta asociación ilícita descripta por el juez Bonadio o para recuperar los activos que pudieran haber sido afectados por la comisión de los delitos.

Centeno está acusado de ser “partícipe necesario” de la asociación ilícita que, para Bonadio, tuvo como jefes al fallecido ex presidente Néstor Kirchner y su sucesora Cristina Fernández de Kirchner.

Otro de los imputados que se entregó esta mañana fue Fabián García Ramón, ex director de Promoción de Energías Renovables y Eficiencia Energética, quien se presentó de manera voluntaria en los tribunales de Retiro.