Las juventudes no perciben peligro en el "flow" libertario que rima institución con aniquilación.

En su último disco Súper Terror, Él Mató a un Policía Motorizado canta «Quiero saber adónde ir / Quiero saber a quién seguir / Todo lo que me importa no existe más / Quiero saber por quién morir«. Sus integrantes pisan los 40 años. Reluce ahí algo del presente: ¿qué es lo que se viene después del 22?
Acaso el principal rol de un medio comprometido con la democracia sea desenmarañar esta sinfonía discordante –a veces malintencionada– en la que hay que elegir el próximo gobierno nacional. Si bien la encuestología falla y falla y vuelve a fallar, sirve observar los trabajos sobre cómo piensan su voto los grupos sociales argentinos. El sonido permanente del 2023 electoral es la tendencia mayoritaria del voto joven hacia Javier Milei. También el decil socioeconómico menos favorecido elige en el cuarto oscuro la boleta de La Libertad Avanza.
Un informe publicado hace pocos días por Sentimientos Públicos, grupo de estudio sobre opinión pública, habla de una nueva fractura social. «Los votantes de Milei parecen ser aquellos que tienen poco que perder», afirma. Casi el 50% de los votantes entre 16 y 40 años lo eligen. «Los indecisos son preponderantemente jóvenes menores a 40 años. Se parecen a los votantes de La Libertad Avanza«, alerta el trabajo, realizado sobre 8400 casos a nivel país.
Opera entonces una fractura generacional de sentido, de horizonte. Aunque haya sido dicho hasta el hartazgo, ser joven en Argentina es transitar años donde casi todo es aguante y resignación. Sobran las ganas de jugarse un pleno por el outsider, el revulsivo, el empático rabioso.
En contraste, a Milei no lo vota casi ningún adulto mayor. Algo espanta. Tampoco faltan los murmullos en off que narran la preocupación del poder económico tras los encuentros privados con el candidato, su fajinada vice y demás lugartenientes: La Libertad Avanza canta lo mismo en las pantallas que ante privilegiados espectadores desesperados por pactar.
Destacan todos los estudios hasta ahora publicados que las mujeres y disidencias rechazan a Milei en porcentajes significativos. Una potencia resistente a los cantos de sirena, melodías efectivas pero monstruosas, trágicas. Aunque las urnas no develen el voto por género, se intuye un dique de contención al crecimiento libertario. La violencia que cargan las palabras de LLA casi se siente en la piel.
Las juventudes de nuestro país se asoman a un abismo porque no perciben peligro en el flow libertario que rima institución con aniquilación. Una buena charla intergeneracional podría empezar por ahí. Entre sus carencias y abandonos, el Estado es ese instrumento que muchas veces se escucha, ensordecedor, cuando deja de sonar.
La decepción siempre es docente y la esperanza no se le niega a nadie. Pero ante el riesgo abierto para la democracia que representa Milei, son días para cantar y coser zurciendo los lazos, más allá de lo que puedan los candidatos. Entre jóvenes y viejos, encontrar esa canción que sepamos todos.
Exceso de funciones, sobrecarga laboral, bajos salarios, falta de reconocimiento y la creciente violencia escolar…
La película de Guadalupe Yepes indaga en el vínculo emocional de dos personajes atrapados en…
Gustavo Moscona la memoria en performance en una obra que desafía convenciones. El dispositivo que…
Es uno de los periodistas y economistas más reconocidos del país. Su estilo elude la…
Stroscio acompañó al "Tata" Cedrón por 25 años y ahora vuelve, cada tanto, para tocar…
En los cuentos de La perrera, el argentino Gustavo Barco ofrece una voz narradora novedosa…
Las propuestas más atractivas de música, cine, teatro, streaming y diversas actividades culturales.
Jugará contra Austria, Argelia y Jordania. Los partidos serán en Kansas City y Dallas, con…
Miembros del Observatorio Lawfare, los autores comparten reflexiones sobre el rol asignado a América Latina…
En un acto en Foetra, Calamai fue reconocido como socio honorario por su acción comprometida…