El gobierno refuerza el armado de la Corriente Nacional de la Militancia ante una “oposición que apunta a desestabilizar»

Durante más de una hora y media, Alberto Fernández estuvo charlado por Zoom con más de cien militantes de todo el país. Quiso tomar el pulso de cómo está la situación en el territorio en distintas provincias y localidades. Y también quiso formar parte del armado político que se cargaron al hombro Agustín Rossi, Daniel Filmus y Cristina Álvarez Rodríguez. Fue el primer encuentro del presidente con la Corriente Nacional de la Militancia.

Para celebrar los 15 años del nacimiento de la Corriente Nacional de la Militancia, que se formó durante el primer mandato de Cristina Fernández, el ministro de Defensa Rossi llamó hace dos semanas a la diputada Álvarez Rodríguez y al secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur de la Cancillería Filmus para agruparse. Con Álvarez Rodríguez habían sellado su relación en los años macristas en Diputados. Con Filmus comparten espacio desde hace años. La idea de una charla con el presidente surgió en la reunión virtual que se realizó la semana pasada entre los tres dirigentes y compañeros del espacio de todo el país. Le consultaron a Alberto y aceptó.

Este lunes por la tarde, los tres armadores fueron a la Casa Rosada y desde allí, junto a Fernández, hablaron con más de una centena de concejales de pueblos, dirigentes y militantes de todo el país. Según contaron, cayó muy bien el tiempo que se tomó el presidente para preguntar y escuchar pareceres de todos lados, en este contexto de pandemia, y de “oposición que apunta a desestabilizar». Se sumaron diputados provinciales de Catamarca, Corrientes y Chaco. El Chivo puso su armado en Santa Fe y Filmus, CABA.

La diputada sobrina nieta de Eva Perón quedó a cargo del armado político en la provincia de Buenos Aires. Según contaron fuentes que participaron del encuentro virtual a Tiempo Argentino, Álvarez Rodríguez consultó con Máximo Kirchner y ambos dirigentes coincidieron en la necesidad de construir ese armado. A Máximo le pareció bien que se arme un espacio peronista kirchnerista que por cuestiones generacionales quedaron por fuera de La Cámpora y de las organizaciones territoriales.

La diputada también quedó como referente del espacio feminista dentro de la Corriente, a la que se sumó la senadora pampeana Norma Durango, la primera en mostrar un pañuelo verde dentro de la conservadora Cámara Alta. También se sumó la diputada entrerriana Blanca Osuna.

El presidente sostuvo: “Tenemos que estar muy orgullosos de lo que hemos hecho, porque lo primero que hicimos además fue atender a los que estaban más desposeídos”. “Aquella frase que usé el 10 de diciembre cuando asumí, ‘primero los últimos’, la hemos cumplido a rajatabla. De los que más nos hemos ocupado es de los que más habían quedado postergados, eso debe enorgullecernos como fuerza política, porque nosotros nacimos a la política argentina para ser la voz de los que no tenían voz”, sostuvo, rodeado de Rossi, Filmus y Álvarez Rodríguez.

“Creo que en el primer trimestre del año que viene vamos a poder estar decididamente poniendo todo nuestro esfuerzo para trabajar para que la Argentina recupere el consumo, recupere la inversión y recupere el trabajo, y volvamos a instalarnos como un país que crezca, que es lo que hace tiempo en la Argentina no pasa”, aseguró el presidente.