El texto, anunciado por Macri en su discurso en el Parlamento el 1º de marzo, no tiene los elementos para lograr esa equidad.

El dato sustancial y que generó mayores rechazos es que la iniciativa no prevé ningún mecanismo coercitivo sobre las empresas para obligarlas a sostener la igualdad salarial. Tampoco prevé iniciativas en relación al trabajo no registrado.
Al respecto, la iniciativa, titulada Equidad de género e igualdad de oportunidades en el trabajo, indica que los empleadores, a nivel individual o a través de las entidades representativas de su actividad, deberán elaborar o adherir a un código de conducta relativo a las medidas adoptadas para garantizar el respeto a la igualdad de género en el interior de la empresa.
Dicho código será remitido, por vía electrónica, al Ministerio de Trabajo para su conocimiento.
El texto no incluye mención alguna a cómo se deberán tramitar las denuncias en caso de que una empresa no acepte la paridad salarial para hombres y mujeres por igual tarea. O si una empresa que aceptó el código de conducta decide no aplicarlo.
Según los expertos, la disparidad salarial entre hombres y mujeres se da mayormente en el trabajo no registrado o en las posiciones laborales vinculadas a las tareas de dirección en las empresas.
En cambio, esa disparidad no se da en la enorme mayoría de actividades cuyas remuneraciones están reguladas por los convenios colectivos de trabajo.
Según el experto Luis Campos, director del Observatorio del Derecho Social (ODS) de la CTA Autónoma, «no es que no la haya, sino que entre los trabajadores que están por convenio la diferencia salarial tiene un alcance menor. No es el supuesto más generalizado».
Campos le dijo a Tiempo que la disparidad salarial en perjuicio de las mujeres se da por dos vías. De un lado, por la actividad en la que las mujeres participan de forma mayoritaria, caso del servicio doméstico, y cuyo nivel salarial es más bajo que el de otras en las que las mujeres son minoría.
Del otro, por el «techo de cristal», es decir, la falta de oportunidades para que las mujeres accedan a cargos de mayor responsabilidad y, por lo tanto, mejor pagos, una situación que se observa en prácticamente todos los ámbitos sociales.
El proyecto de ley incluye un artículo destinado a los sindicatos, a los que sí se obliga a incluir en sus estatutos internos (que tienen fuerza de ley) «las normas estatutarias pertinentes para garantizar el respeto a la igualdad de género en el interior de sus organizaciones».
El capítulo II del proyecto se llama «De la conciliación del trabajo con la vida privada y familiar», un título que quizá se queda corto para objetivo tan grande.
Allí se estipulan los nuevos plazos de las licencias y se agregan nuevas instancias para disfrutarlas, de las que sobresale la que se otorga por nacimiento o adopción de hijo, de 15 días corridos.
Será por al menos 14 días, aunque la producción plena recién volvería el 5 de…
El debate sobre cómo podrían conformarse las comisiones que tratarán los dos proyectos centrales del…
Es en la comparación contra el mismo mes de un año atrás según los datos…
El calor de la noche porteña se mezcló con los riffs hipnóticos y la psicodelia…
Las empresas no aseguran el pago de sueldos de noviembre y el gremio aseguró que…
Más de 25 entidades lanzaron un documento conjunto donde desmitifican postulados lobbystas y resaltan la…
El Observatorio de la Deuda Social aclaró que en realidad la contracción es de poco…
Fue en el marco de las actividades por la conmemoración del cumpleaños 97 de Hebe.…
Una pareja de personas adultas mayores necesitó en octubre $1.278.026 para cubrir sus gastos mensuales. Teniendo en…
Las defensas del ex titular de la Agencia de Discapacidad y de los dueños de…
Se trata de la causa que obligó a Sandra Pettovello a repartir la comida almacenada…
El organismo le reclamó al gobierno un marco monetario y cambiario “coherente” y exigió cumplir…