Liberatori le respondió a Garavano por las tomas: “¿Cuál es la ilegalidad?”

La jueza porteña Elena Liberatori le respondió al ministro de Justicia, Germán Garavano, quien aseguró que la toma de colegios constituye «una ilegalidad», al advertir que «no hay delito de usurpación» en la ocupación de establecimientos de estudiantes que rechazan la reforma educativa.

La jueza en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad de Buenos Aires, Elena Liberatori, había suspendido el 14 de setiembre mediante una medida cautelar la aplicación de un instructivo del gobierno porteño para casos de alumnos que tomen establecimientos.

“La conozco a la doctora Liberatori. Es un error. La jueza Liberatori tiene varios pronunciamientos en este sentido, en una línea que yo no comparto: me parece totalmente desacertada”, advirtió al respecto Garavano el lunes y agregó que sí son ilegales las tomas.

En respuesta, la magistrada que habla muy poco en los medios interrumpió su breve licencia por cuestiones de salud para responderle al ministro nacional. «No está mal que opine Garavano, pero aclaro que nunca avalé las tomas», dijo la magistrada, y agregó: «Al ser aludida por el ministro de Justicia en forma personal, sentí que debía responder».

«Pregúntenle a Garavano cuál es la fuente de la ilegalidad. Aquí no hay delito de usurpación», sostuvo en diálogo con Ida y Vuelta por radio Cooperativa. En ese sentido, la jueza Liberatori subrayó que «no hay usurpación contra las propiedades del Estado, porque los estudiantes no quieren ser titulares del inmueble».

«La toma está dentro de los actos desesperados cuando encontramos una pared que no escucha y no siente», manifestó, y recordó: «Tuvimos el mismo problema con el ministro anterior, (Esteban) Bullrich. Los estudiantes no revindican la toma en sí misma». «Hay derechos constitucionales afectados. Es una falacia que se vulnera el derecho de otro estudiante», aseveró.

Liberatori dijo que «la toma es un modo inapropiado de reclamar por algo legítimo» y consideró que «el gobernante tiene que escuchar a los estudiantes».