Malcorra anunció el apoyo al papa en su gestión de diálogo en Venezuela

La canciller Susana Malcorra reafirmó el apoyo de la Argentina y de otros siete países latinoamericanos a las expresiones del papa Francisco en torno a la crisis en Venezuela. Así lo hizo al difundir a través de su cuenta en la red social Twitter la imagen de un tramo del comunicado conjunto que las cancillerías de esos países emitieron ayer, en el que expresaron la adhesión a «las expresiones de Su Santidad el Papa Francisco realizadas realizadas en las últimas horas, en relación con la situación que vive Venezuela».

«#Venezuela: Gobiernos de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Perú, Paraguay y Uruguay adherimos a expresiones de @Pontifex_es», tuiteó el domingo a la noche la ministra de Relaciones Exteriores y Culto.

El comunicado, difundido conjuntamente por las naciones que lo suscriben, señala que los gobiernos de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Perú, Paraguay y Uruguay adhieren «a las expresiones de Su Santidad el Papa Francisco». Los países firmantes afirman, en esta declaración conjunta, que, tal como lo señaló el Sumo Pontífice, es imprescindible contar con «condiciones muy claras» para una salida negociada a la crisis política, económica y humanitaria que vive Venezuela.

En este sentido, el comunicado cita una expresión del Papa, cuando señaló que «todo lo que se pueda hacer por Venezuela hay que hacerlo, pero con las garantías necesarias».

Los países que suscriben el comunicado agregan que eso requiere «el cese de los actos de violencia, la plena vigencia del Estado de Derecho, la liberación de los presos políticos, la plena restitución de las prerrogativas de la Asamblea Nacional, y la definición de un cronograma electoral».

La semana pasada el tema Venezuela ya había sido motivo de análisis y preocupación en el Gobierno argentino, cuando el presidente Mauricio Macri lo incluyó en la agenda de temas que conversó con su par norteamericano Donald Trump durante la reunión que mantuvieron el jueves en Washington.

En una declaración conjunta que suscribieron ambos mandatarios, señalaron su «fuerte preocupación por la deteriorada situación en Venezuela» y afirmaron que acordaron trabajar «estrechamente» para «preservar las instituciones democráticas en ese país».