Se trata de Harbour Energy, que durante un año tuvo en su cartera el 40% del yacimiento Sea Lion, el de mayor potencial de las islas. Al vender el proyecto a fines de 2021 se liberó de sanciones.

La plataforma Eirik Raude, contratada para realizar exploración en Malvinas en 2015.
Wintershall Dea es propiedad del conglomerado químico alemán Basf y posee activos petroleros en varios países. En la Argentina tiene concesiones en Vaca Muerta y en el mar frente a Tierra del Fuego.
El comprador es Harbour Energy, una firma con sede en Londres que estuvo a punto de ser sancionada por la Argentina en 2021 por sus actividades ilegales en Malvinas.
En enero de 2021, Harbour Energy concluyó el proceso de compra de Premier Oil, una petrolera que poseía el 40% del yacimiento offshore Sea Lion, ubicado a unos 250 kilómetros al norte de Puerto Argentino, capital de las islas Malvinas.
Premier Oil llegó en 2012 a Malvinas cuando se asoció a la petrolera Rockhopper Exploration, cuyo principal activo era Sea Lion, un yacimiento al que se le adjudican reservas de petróleo por unos 700 millones de barriles y que es el principal de todos los que rodean a las islas.
Premier invirtió más de U$S 500 millones en la exploración de Sea Lion. A pesar del esfuerzo financiero, nunca pudo superar la fase preliminar de prospección, lejos de la etapa de extracción.
Agotada por el peso de las deudas contraídas, que sumaban unos U$S 2700 millones, Premier encontró una salida con su venta a Harbour Energy, que en el paquete de activos adquiridos se encontró con el 40% de Sea Lion.
En abril de 2021, Harbour Energy firmó acuerdos para vender su participación en Sea Lion, además de otros activos menores en la zona, a la firma israelí Navitas Petroleum. La venta se concretó recién a fines de ese año.
En el ínterin, Harbour estuvo en la mira de las autoridades argentinas. La Secretaría de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur pidió a la Secretaría de Energía el inicio de una investigación sobre las actividades de Harbour Energy y de Navitas en Malvinas. Cuando finalmente salió la sanción, en abril de 2022, Harbour ya se había retirado del proyecto, que quedó en manos de Navitas y Rockhopper.
Energía sancionó a Navitas con la prohibición de operar en territorio argentino durante 20 años por operar en forma «clandestina» en Malvinas al no haber requerido la autorización de la Argentina. Navitas cuenta con la habilitación ilegal de las autoridades coloniales británicas.
En su decimocuarto álbum, Dárgelos y compañía ofrecen un espejo deformante de la época. Fusionan…
El pianista y su agrupación presentan este viernes un disco en proceso que convierte la…
El presidente venezolano agradeció “de todo corazón” a su par colombiano por “todo lo que…
El ministro de Economía anunció que se trata de una decisión necesaria para poder afrontar…
Tras los aumentos en el Garrahan, el Ministerio de Salud dio a entender que todas…
El evento para sortear la fase de grupos de la cita mundialista de Estados Unidos,…
Será por al menos 14 días, aunque la producción plena recién volvería el 5 de…
El debate sobre cómo podrían conformarse las comisiones que tratarán los dos proyectos centrales del…
Es en la comparación contra el mismo mes de un año atrás según los datos…
El calor de la noche porteña se mezcló con los riffs hipnóticos y la psicodelia…
Las empresas no aseguran el pago de sueldos de noviembre y el gremio aseguró que…
Más de 25 entidades lanzaron un documento conjunto donde desmitifican postulados lobbystas y resaltan la…
Ver comentarios
Que bueno no...!! Nosotros les vendemos petróleo para los mismos barcos y material bélico que usan en nuestras Malvinas.. ahora anda a comprar algo a los ingleses a ver si nos venden algo de ellos... !!
El gobierno argentino no debería venderle nada a Inglaterra