Por una historia clínica para los pueblos fumigados

Por: Gastón Rodríguez

Un demorado informe de la Sociedad Argentina de Pediatría señala el "efecto de los agrotóxicos en la salud infantil". Vecinos de localidades que padecen los pesticidas reclaman que los diagnósticos médicos incluyan una perspectiva ambiental. "¿Fumigan cerca de su casa?"

Ni siquiera hay que pensar en un diagnóstico funesto (los hay y son demasiados). Algo trivial, que no provoque intranquilidad, frecuente. Una erupción en la piel, por ejemplo. El pediatra prescribe una crema, y luego, todavía confiado, aunque persistan la picazón y el enrojecimiento, ordena las previsibles muestras de orina y sangre. Los estudios salieron bien, pero la afección no mejora; los padres se inquietan y el médico aconseja la derivación a un especialista. La visita a uno y otro consultorio puede volverse habitual y, al mismo tiempo, seguir sin saber qué está sufriendo el paciente, que encima es un chico. Si en ese derrotero alguien hubiera preguntado por la actividad productiva cercana a la familia, si hubieran confirmado que en los alrededores de la casa o la escuela se siembra soja, recién entonces sabrían que están frente a uno –con seguridad, uno leve– de los efectos de la exposición a agrotóxicos. Para los pueblos fumigados, la incorporación de una historia clínica ambiental en las consultas médicas se ha vuelto un reclamo urgente.

“Las instituciones de salud aún siguen sin considerar el daño que produce este modelo tóxico. Pedimos la incorporación de una historia clínica ambiental en la consulta médica, atención inmediata y estudios acordes a las actividades productivas cercanas al entorno del paciente”, reza el video colaborativo difundido por un grupo multidisciplinario de activistas que reúne a profesionales de la salud, realizadores audiovisuales, comunicadores y damnificados directos.

“Surgió de un intercambio ante la necesidad de denunciar y mostrar que la emergencia socioambiental y sus consecuencias no están siendo atendidas como un tema de salud pública, cuando la gravedad actual lo hace prioritario”, explica Anabel Pomar, periodista e integrante de Exaltación Salud.

La demanda del grupo se basa en la carencia de protocolos unificados frente a la niñez expuesta a la batería de plaguicidas que aplica el agronegocio o a los contaminantes que pueden provenir, por ejemplo, de una fábrica cercana. Salvo excepciones, los médicos no preguntan por la forma de producción ni las industrias presentes en el entorno del paciente.

“Es un vacío que se produce en la consulta. Tres décadas de este modelo productivo que esparce millones de litros de tóxicos en la tierra y en el aire y seguimos atendiendo la enfermedad o el síntoma, pero en ningún momento se asocia con la cuestión ambiental. Es urgente visibilizar esta problemática. Lo que dicen los pacientes y los familiares es inapelable. Y sin embargo, son los más silenciados”, dice Mercedes “Meche” Méndez, enfermera de Cuidados Intensivos del Hospital Garrahan y testigo invariable de las enfermedades y muertes provocadas en niñas y niños que llegan desde los territorios fumigados de todo el país.

“Desde el año 2010 –continúa–, desde mi lugar muy chiquito, vengo planteando esta problemática en el hospital, pero nunca me dieron bolilla. Parece que ahora, como lo dice la SAP (en referencia a un informe elaborado por la Sociedad Argentina de Pediatría), el tema existe. Capaz a muchos les sirva para convencerse de algo que las poblaciones damnificadas, con la evidencia en sus cuerpos, venían denunciando a gritos”.

Foto: AFP

Evidencia contundente

Celebrado, aunque también señalado como tardío, la SAP publicó el informe “Efecto de los Agrotóxicos en la Salud Infantil”, que compila el trabajo de varios años de información científica generada local y mundialmente sobre los pesticidas que impulsan el agronegocio, y que evidencia el fuerte impacto en la salud de la población.

Encabezado por la pediatra María Gracia Caletti, el equipo multidisciplinario reconoce que, “si bien hay múltiples publicaciones que dan cuenta de diversos efectos perjudiciales sobre la salud, no disponemos en el ámbito pediátrico nacional de un documento que resuma los hallazgos sobre los efectos de los agrotóxicos en la población infantil ni aborde esta problemática de modo integral, aun cuando existe una gran cantidad de pediatras que atienden pacientes que viven en zonas agroproductivas que están expuestos en forma directa e indirecta a los agrotóxicos”.

En un sentido más amplio, el informe advierte que hay en el país «escasa información epidemiológica sobre la salud de pueblos sometidos a fumigación sistemática producida por instituciones sanitarias», lo que llevó a algunas comunidades afectadas a desarrollar proyectos locales que involucran estudios epidemiológicos comunitarios y mapeos colectivos para dar cuenta de la degradación de su salud, casi todos impulsados por grupos de investigadores independientes.

“La declaración de la SAP es importante porque es una institución científica de más de cien años y nos sirve cuando salimos a discutir ordenanzas de protección en los municipios y cuando presentamos amparos en la Justicia. Antes íbamos con los trabajos que hacíamos nosotros en los territorios, pero ahora vamos a poder ir con el informe de la SAP”, destaca Medardo Ávila Vázquez, médico pediatra y neonatólogo, docente de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Córdoba y coordinador de la Red de Médicos de Pueblos Fumigados.

“La red de la SAP –insiste Ávila– llega a 50 mil pediatras, y este informe permite plantearles la mirada ambiental, para que no se queden solo con atender a los chicos ya afectados. Los médicos no tenemos que luchar solo contra la enfermedad, sino también cuidar la salud. Además de buscar que el chico no se nos muera o que no le queden secuelas, tenemos que evitar que les suceda lo mismo a sus hermanitos, a sus vecinos. Para eso tenemos que conocer el contexto, entender cuál es el problema y reclamar medidas de protección para toda la comunidad. Por eso, ya desde el título, el informe termina con la discusión. No habla de fitosanitarios ni de protectores de los cultivos, sino de agrotóxicos. La evidencia científica es contundente. Son tóxicos y dañan el desarrollo neurológico de los niños, les causa malformaciones, asma y cáncer. Lo que queda es disminuir su uso, pero para lograrlo necesitamos una decisión política”.

Sin límites

Hay 107 agrotóxicos prohibidos en al menos un país que hoy se utilizan en la Argentina. Si bien la Ley Nacional de Ambiente prevé la estipulación de presupuestos mínimos de protección, aún no existe una normativa que regule su uso en todo el territorio nacional. Así, salvo localidades donde se han dado intensas luchas por parte de los vecinos afectados y se obtuvieron ordenanzas municipales restrictivas, casi no hay límites al uso de estos productos.

Ver comentarios

  • En la nota se habla de un video colaborativo difundido por un grupo multidisciplinario de activistas que reúne a profesionales de la salud, realizadores audiovisuales, comunicadores y damnificados directos, pero no sé incluye un enlace web para acceder al video ni pude encontrarlo por los buscadores. ¿Podrían incluir más datos para buscar ese material? ¡Gracias!

Compartir

Entradas recientes

Rezo por vos: oración ecuménica por la salud y la libertad de Cristina en el Otamendi

Militantes y vecinos se congregaron frente al centro médico para realizar una plegaria colectiva por…

1 día hace

Cristina seguirá internada por un cuadro de “íleo postoperatorio” tras la cirugía de apendicitis

El diagnóstico fue confirmado por una tomografía computarizada. La ex presidenta “continua bajo tratamiento antibiótico…

1 día hace

“Abróchense los cinturones”: en Navidad, Milei ratifica el rumbo del ajuste

Entre brindis y consignas místicas, el presidente utilizó su mensaje de Nochebuena para jactarse de…

1 día hace

Kicillof apunta contra el Gobierno: “Es un desastre lo que están haciendo”

En declaraciones radiales el gobernador bonaerense calificó el programa económico del gobierno nacional como “una…

1 día hace

Hernán Cuevas: «Imagino un futuro sin mandatos ni cuerpos juzgados»

Se ganó un lugar entre el público masivo a partir de su trabajo en "División…

2 días hace

Repudian a Milei por regalar a su gabinete un libro que avala y promueve el trabajo infantil: «Es un delito»

Con la firma de Walter Correa y Nicolás Viñes, secretario ejecutivo de la COPRETI, el…

2 días hace

Navidad a la baja: las ventas de juguetes cayeron 6,9%

Lo advirtió la Cámara Argentina de la Industria del Juguete. Las ventan online ya representan…

2 días hace

Rocambole, el arquitecto estético de Los Redondos: “Todo arte es político”

Desde los '60 en La Plata hasta la flamante exposición en el Centro Cultural Recoleta,…

2 días hace

Premio Witcomb a las Artes Visuales: se prorrogó el plazo para la recepción de obras

Debido a la gran convocatoria y a los numerosos pedidos recibidos por parte de artistas…

2 días hace

Kate Winslet debuta como directora en «Adiós, June» y explora los laberintos de la pérdida

La actriz retrata el desgaste emocional que acompaña a la ausencia y el duelo. Un…

2 días hace

Papá Noel: de la ilusión al marketing

La verdadera historia de una figura icónica, Papá Noel, ese gordito simpático que anda vestido…

2 días hace

El «regalo» de Navidad del gobierno a los jubilados: $23 mil de aumento desde enero y el bono sigue congelado

El haber mínimo pasa a $349 mil y se mantiene el bono en $70000. El…

2 días hace