«Si Patricia Bullrich piensa que apretando nos va a sacar de la calle está muy equivocada»

El gobierno nacional completó el viernes siete días sin cumplir con la resolución del Grupo de Trabajo sobre Detención Arbitraria de la ONU que ordenó liberar de “inmediato” a Milagro Sala. Y como corolario de esa semana, el aire político se enrareció con el ataque a la sede porteña de la Tupac Amaru que sumó todos los ingredientes de un mensaje: fue perpetrado por tres hombres armados que maniataron a tres militantes tupaqueros -a uno le gatillaron en la rodilla sin que saliera el disparo- y, sin robar nada, ordenaron que “dejen de joder” con la dirigente social y aseguraron tener la zona liberada. Los atacantes también relacionaron la amenaza con el acampe que tras la multitudinaria marcha de las dos CTA, el Comité por la Libertad de Milagro Sala iniciaba en Plaza de Mayo para reclamarle al presidente Mauricio Macri que acate la resolución internacional.

“Queremos ir hasta el final porque cuando lleguemos a estos tres tipos vamos a saber quiénes los mandaron. Porque no fueron a robar, fueron a apretar. Y si Patricia Bullrich piensa que apretando nos va a sacar de la calle está muy equivocada”, dijo ayer el coordinador nacional de la Tupac Amaru, Alejandro “Coco” Garfagnini.

El señalamiento político fue en una conferencia de prensa del Comité que se realizó en la carpa instalada a metros de la Casa Rosada para anunciar el acampe que se extenderá hasta el viernes 11 de noviembre, cuando se cumplen los 300 días de detención de la parlamentaria del Mercosur.

Los integrantes de la Tupac estuvieron acompañados por diputados nacionales y dirigentes de organizaciones sociales, sindicales, políticas y de organismos de derechos humanos, quienes repudiaron el ataque a la casa tupaquera del barrio de Monserrat y exigieron un “inmediato esclarecimiento”.

Además, responsabilizaron a la Ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y apuntaron al Secretario de Derechos Humanos de la Nación, Claudio Avruj, a quien acusaron de mentir respecto de la resolución de la ONU para justificar la detención de Sala.

El ataque a la sede de la Tupac, ubicada en San José y México en la C.A.B.A, se leyó como una reacción ante el golpe político que recibió Macri con la resolución de la ONU. Y remarcaron que en los últimos días “hemos visto la peor cara, la más real del gobierno nacional”.

“Han puesto a operar y trabajar a dos funcionarios del gobierno nacional: Avruj, que es la cara más potable o más buena según interpretan ellos, y la otra es Patricia Bullrich, que es la brutalidad”, resumió Garfagnini que llevó la voz cantante de la conferencia en la que estuvo secundado por el titular de la CTA, Hugo Yaski, y la abogada de Sala, Elizabeth Gómez Alcorta.

“Fueron 3 personas, hablaron del acampe, entraron a la sede con armas automáticas, agredieron a los compañeros, insultándolos, hablaban de ‘esa negra de mierda’, decían ‘dejensé de joder con Milagro Sala’. Dijeron que ni nos molestemos en ir a la policía porque la zona estaba liberada. Así operaron para tratar de que nos atemoricemos, para que levantemos este acampe”, dijo.

Las sospechas recayeron sobre el Ministerio de Seguridad. “Nosotros denunciamos a Patricia Bullrich hace 10 días por espionaje ilegal”, dijo.

En una charla radial con Sala poco antes de la conferencia, el ex canciller argentino y actual presidente del Parlasur, Jorge Taiana, opinó que “es muy difícil no vincular el amedrentamiento con que hay un pedido muy expreso de libertad inmediata del grupo de trabajo de la ONU”. Y dijo que es evidente que “hay responsabilidades políticas”. La conversación se produjo luego de que la dirigente pidiera jurar ante el Parlasur desde la cárcel.

El acampe es la segunda protesta en Plaza de Mayo luego de la huelga de hambre de mediados de agosto. Durante toda la semana, Avruj remarcó que el gobierno hará todo por mantener presa a Sala. La confesión más brutal fue la frase del gobernador Gerardo Morales: “no voy a liberar a esa mujer”, dijo en una demostración de ausencia de independencia de poderes en Jujuy.

Por eso ayer el Comité por la Libertad buscó marcar los falsos argumentos gubernamentales: “No es una resolución apelable. Eso de que tiene que ir al Consejo de Derechos Humanos (para ser válido) es falso. Es mentira que tienen 180 días para cumplir, porque la resolución dice que la libertad debe ser inmediata. Por otro lado, la falacia más grande es que la resolución es por el acampe, porque la denuncia se se presentó en la ONU el 2 de febrero cuando Milagro ya estaba excarcelada por esa causa”, dijo Gómez Alcorta.

En la conferencia dijeron que esa discusión la tendrán el 8 de noviembre cuando el Comité se reúna con Avruj, en la segunda de las mesas de trabajo inauguradas por el ministro de Justicia Germán Garavano. También adelantaron la visita de parlamentarios del Mercosur a la dirigente detenida en el Penal de Mujeres de Alto Comedero, y adelantaron la realización de un Encuentro de Comités por la libertad en la capital jujeña antes de fin de año “porque queremos una navidad sin presos políticos”, explicaron.