El 18 de enero de 2020, el joven salió a bailar con sus amigos al boliche Le Brique, en Villa Gesell, pero un grupo de rugbiers de Zárate lo asesinó a traición a la salida. Cronología de un caso que marcó a la sociedad.
A las 04.32, el joven es sacado del boliche por una discusión con otro grupo. Cruzó la Avenida 3 con la idea de comprarse un helado. Jamás imaginó que Máximo Thomsen, Ciro Pertossi, Enzo Comelli, Matías Benicelli, Luciano Pertossi, Ayrton Viollaz, Blas Cinalli y Lucas Pertossi lo estaban buscando para escarmentarlo.
A las 04.55, Lucas Pertossi mandó un audio al grupo de vacaciones donde les contó que el chico había muerto: “Estoy acá cerca donde está el pibe y están todos ahí a los gritos. Está la policía, llamaron a la ambulancia… caducó”.
La palabra “caducó” quedaría grabada en la memoria colectiva y determinaría la suerte del grupo de rugbiers.
Las cámaras de seguridad de un McDonald’s registraron cuando el propio Pertossi y Thomsen comían hamburguesas después del ataque. Había tenido tiempo para cambiarse las ropas manchadas con sangre.
Horas después, la Policía bonaerense irrumpió en una casa alquilada en la zona del bosque y detuvo a los ocho rugbiers (En el operativo también quedaron arrestados Alejo Milanesi y Juan Pedro Guarino, pero febrero de 2020 fueron excarcelados por falta de mérito y en la elevación a juicio oral quedaron sobreseídos).
La autopsia al cuerpo de Fernando reveló que murió de «forma traumática por un paro cardíaco traumático por shock neurogénico producido por múltiples traumatismos de cráneo que generaron hemorragia masiva intracraneana intraparenquimatosa sin fractura ósea».
Los peritos reconstruyeron que Fernando no pudo defenderse, que un golpe lo dejó inconsciente y que después solo fue un cuerpo inerte recibiendo la saña de varios.
En febrero de 2023, los ocho atacantes fueron condenados por el crimen. Máximo Thomsen, Ciro Pertossi, Luciano Pertossi, Enzo Comelli y Matías Benicelli recibieron cadena perpetua, mientras que Lucas Pertossi, Blas Cinalli y Ayrton Violaz fueron condenados a 15 años de cárcel por ser partícipes necesarios del homicidio.
En marzo de 2024, la Cámara de Casación confirmó las condenas a los rugbiers que asesinaron a Fernando Báez Sosa. Si bien corrigió la calificación y consideró que no hubo alevosía, el Tribunal ratificó las penas para los ocho imputados.
Graciela Sosa, madre de Fernando, publicó un video a través de la red social Instagram en conmemoración del quinto aniversario de su crimen y para informar que este sábado 18 de enero a las 19.30 se realizará en la parroquia Santísimo Redentor, en Recoleta, una misa en su memoria.
“Mantendremos viva tu memoria, seamos todos la voz de Fernando implorando justicia”, cierra el mensaje.
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