La producción rescata la historia del Operativo Cóndor, cuando en 1966 una decena de militantes desvió un avión de Aerolíneas Argentinas para llegar a las Islas. Se puede ver en Encuentro desde este viernes.

“En 1966, este grupo de jóvenes que eran realmente muy jóvenes -tenían entre 18 y veintipico de años- y que son parte de una generación que, más que nada, son hijos de empleados y obreros, se agrupan en un reclamo sobre todo antiimperialista”, cuenta Nano Garay Santaló, uno de los dos directores de la serie. Estos jóvenes -había una sola mujer, María Cristina Verrier-, casi todos obreros o estudiantes vinculados a distintas agrupaciones nacionalistas, estaban liderados por Dardo Cabo, peronista en épocas de proscripción.
“Si bien la guerra nos parecía el punto más fuerte por la tragedia que fue, hay mucha historia fascinante. Y esta es una de ellas, porque además, cuando esos chicos vuelven al país, los declaran facciosos y los mete presos Onganía, un militar, y los militares serían después los que declaran la guerra.», dice Garay y recuerda que en la gesta, el comando rebautizó Puerto Stanley como Puerto Ribero, en homenaje al Gaucho Ribero, que en 1833 resistió invasión británica.
La serie, que ya se emitió en mayo por la TV Pública y también está en la plataforma Cont.Ar, fue la ganadora del concurso Renacer Audiovisual del Ministerio de Cultura y la Secretaria de Medios y Comunicación Pública en la categoría de ficción histórica, y está realizada por la productora Labhouse/BdeBueno. Creada por Agustín Ortíz Byrne y Nati Holland, el guión pertenece a la misma Holland y Paula Marotta, que como el mismo Garay y Fede Suarez (el otro director), pertenecen generacionalmente a años posteriores. “Yo nací en 1983, así que no tengo personalmente tan presente la guerra. El Operativo Cóndor nos llamó la atención porque cuando nosotros nombramos Malvinas, lo primero que se nos viene a la cabeza es la guerra, pero hay otras aristas. Y muy interesantes. Esta es una historia fascinante que nos conquistó como para para querer hacer un abordaje audiovisual.”
Además del rescate del hecho histórico, que es donde reside su mayor fortaleza, la serie tiene desafíos narrativos que sobrelleva con muy buen pulso. El primero de ellos, transmitir con verosimilitud los hechos, que incluían el secuestro de un avión. «No existía la concepción de hacer algo así en esa época, y eso también es un poco lo fascinante del evento. Por eso la seguridad era muy fácil de romper, se podían entrar armas, no se revisaba.” El otro punto, tal vez más local, tiene que ver con que en los años posteriores a la dictadura, en el imaginario popular la política se fue separando de su componente de aventura, elementos tan imbricados hasta entonces, que se puede decir que había alcanzado su clímax con el Che Guevara. «Tuvimos la oportunidad de leer muchos artículos e informes, y muchas cosas están relatadas en primera persona, porque hasta tuvimos la posibilidad de hablar con algunos de quienes participaron. La cuestión es que en ese momento, el Che Guevara estaba en Bolivia y estaba muy cercana la historia de la guerrilla, y ellos eran jóvenes, no tenían nada que perder, y querían hacer un cambio importante. Y eso lo linkeamos con dos cosas: una, con la representación de lo que pensamos que fue lo que movilizó a esos jóvenes; y otra, con el contenido audiovisual. Nosotros no queríamos hacer una biopic documental, sino una ficción que sea de género, que sea atractiva”.
Así, sigue Garay, en Cóndor Uno Cero “cada capítulo homenajeamos a un género. En el primero es más espionaje, casi no hay diálogo, es todo muy detectivesco. Queríamos hacer una pieza audiovisual atractiva para que el público pueda meterse, sumergirse en una historia que pasó acá, en la Argentina, que tiene mucha relación con lo que vendría años después. No pareció que lo mejor era usar el código audiovisual de hoy para contar lo que creemos fue buena parte de la esencia y la historia para lo que después fue todo el movimiento de los ’70”.
Cóndor Uno Cero Cinco
Una miniserie de Renacer Audiovisual. Creadores: Agustin Ortiz Byrne, Nati Holland Showrunner: Agustin Ortiz Byrne. Directores: Federico Suarez, Nano Garay Santaló. Con Nicolás Alejandro Mateo, María Abadi, Julián Tello, Cristian Jensen, Gustavo Darío Pardi, Bruno Alcón, Valentina Cottet, Bautista Logioco. Eduardo Green, Julián Larquier, Raymond Carmichael. Estreno viernes 11 de agosto a las 21, por Encuentro.
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