Diez propuestas escénicas con la Cámara Gesell como metáfora de la actual sociedad de la vigilancia

En una habitación separada, lejos del mundo, dos personas se encuentran. Detrás hay alguien mirando: un público experto que toma nota de cada detalle, cada gesto y cada palabra. Eso es la Cámara Gesell. También, el teatro. Y ahora, además, el universo virtual. Teatro Bombón Gesell, el nuevo ciclo del mítico festival de obras cortas que puede visitarse en este FIBA 2023, explora toda la variedad sentidos que suscita un único dispositivo escénico, el de una gran sala negra de observación, como una caja oscura, dividida por un vidrio y con la posibilidad de ver las obras con auriculares que reproducen el sonido en tiempo real. Es un escenario que evoca el pacto de una Cámara Gesell.

En total son diez obras. Entre ellas, Acuario, escrita y dirigida por Janaina Leite, una performance pornográfica en donde dos sexotrabajadoras, interpretadas por Emilia Portman y Cande Pimient, dialogan con sus clientes a través de una pantalla. Hay también una obra escalofriante de teatro de objetos, Rimu dice, escrita por Lucila Castillo y dirigida por Karina Hurtado, sobre una nena, interpretada por Julia Garriz, que brinda testimonio con un títere y a través de la imaginación va dando paso a un mundo monstruoso. En Estás a punto de volver a ser tú, se explora la relación entre un director y una actriz, y con ello la violencia en el  interior de los procesos creativos. La lista de obras sigue. Todo transcurre en un mismo escenario. “La Cámara Gesell tiene esta flexibilidad porque ya trae incorporada la cuarta pared en esta suerte de vidrio espejado. Pero no solamente trae lo teatral sino también –y esta es una reflexión que desencadenó la pandemia- lo virtual. Hay en ese vidrio una resonancia con las pantallas, con la idea de ver sin ser visto, los diálogos a la distancia. Es una especie de síntesis de la vida contemporánea en el sentido de que todos somos observados permanentemente, vivimos en la sociedad de la vigilancia. Hay cámaras por todos lados. Y también somos observadores. Entonces, esta dimensión panóptica que tiene la Cámara Gesell refleja y exalta lo que vivimos en la actualidad”, dice a Tiempo Monina Bonelli, artista y curadora junto a Sol Salinas de esta nueva edición del festival.

Todas las obras están inspiradas en una residencia virtual de dramaturgia que tuvo lugar durante la pandemia y en donde se exploraron distintas temáticas, como la violencia de género, la desigualdad, el colonialismo, el racismo, la justicia, la memoria y la violencia institucional. Estas charlas estuvieron a cargo de artistas y especialistas de las ciencias sociales como Mauricio Kartun, Federico Navarrete, Shila Vilker, Dora Barrancos, Mónica Cabrera y Alejandra Flechne. “Fueron dinámicas de trabajo y de conversación con transmisión de conocimientos, pero sobre todo con la idea de que eso pudiera generar imágenes en los artistas y que a partir de allí se escribieran las obras”, cuenta Bonelli.

Pero, además, gran parte de las obras se crearon a partir de un trasfondo de exploración con la experiencia directa. Es el caso, por ejemplo, de Sus canciones favoritas; el director, Alejandro Claver, fue profesor en un centro de menores en Perú y a partir de esa experiencia reinventó esta obra, en la que un docente brinda un taller de dramaturgia a dos menores que están reclusos. Mutismo selectivo, escrita y dirigida por Bosco Cayo también trata acerca de contextos de encierro, pero con tintes de comedia dramática. Se suman dos piezas documentales: Línea Sur, de la compañía vasco chilena Azkona & Toloza, que trabaja acerca de la violencia contra el pueblo mapuche, y Sujeto social, sobre la comunidad senegalesa, de Brai Kobla, de la Argentina. La lista de obras se completa con Las Dalias, escrita y dirigida por Natalia Villamil, la autora de Rota; Color Bars, escrita por Giordano Castro y dirigida por Alezandre Dal Farra, en donde un episodio trágico tendrá que ser recompuesto a partir de pequeñas escenas separadas, como piezas de rompecabezas; y Los titanes, que retrata el vínculo entre un perro y un nene, y con eso el acompañamiento que brindan estos animales a quienes declaran en la Cámara Gesell.

Todos los textos de las obras están disponibles en la página web de Teatro Bombón tanto en español como en portugués. En mayo, el festival llevará algunas de las obras a Portugal, y se representarán con actores y actrices portugueses en el Festival Internacional de Teatro de Expresión Ibérica. Teatro bombón Gesell es una producción de carácter internacional, y por eso se busca que las obras retornen luego a Brasil, Chile, España, México, Perú y Uruguay, los países que participaron.

En el contexto del FIBA, además de las obras teatrales se presentará Charlas Entre. Actos, un ciclo de 17 charlas performáticas a cargo de los artistas residentes e invitados especiales. Las charlas se realizan en colaboración con las Universidades de Buenos Aires, Quilmes y San Martín Unsam.

Con entrada libre y gratuita, las obras teatrales tendrán lugar hasta el 5 de marzo en el Centro Cultural Recoleta (Junín 1930). Jueves y sábado desde las 17, en continuado hasta las 21 horas. Miércoles, viernes y domingo, la cita es desde las 16 horas.

El ciclo de conversaciones se presentará los mismos días, a las 18:30, 19:30 y 20:30 horas.