Ecuador: no decrece la tensión ni la tendencia de culpar a Correa de todos los males

Por: Ricardo Gotta

El exmandatario, durante el gobierno, lanzó un plan con las bandas que bajó sensiblemente la tasa de asesinatos: igual le achacan el auge narco. En pocas horas se registraron dos muertes sospechosas.

En Buenos Aires, la ministra Patricia Bullrich se perfumaba para anunciar, vivaracha, que familiares de José Adolfo Macías Villamar, alias Fito, líder de Los Choneros ecuatorianos, quien se fugó junto a su hermano y otros presos de la Penitenciaría del Litoral de Guayas, habían sido hallados en una casa en el barrio privado Valle del Golf -sobre la ruta 20, camino a Alta Gracia- en la localidad de Malagueño. Dijo: «Que lo sepa todo el mundo. Argentina no va a ser un narcopaís», aunque sólo se tratara de la mujer del criminal, Mariela Peñarieta (conocida como Inda, de 48 años) y tres de sus hijos: Michelle (21); Ilse María (12) y Lian Sejam (4).

En Guayaquil, llegado el fin de semana, mientras que el clima de tensión no se detiene y tampoco la búsqueda de los narcos fugados, dos sospechosos permanecían detenidos por su presunta implicancia en el asesinato del fiscal ecuatoriano César Suárez Pillay, cocido a tiros en su automóvil, el miércoles pasado. Se trata de un conocido fiscal por haber asumido casos de corrupción en hospitales durante la pandemia del Covid-19, quien no sólo tenía a su cargo varias causas que involucran a grupos de narcotraficantes sino que investigaba el copamiento a los estudios de TC Televisión, un episodio que fue símbolo del estallido de la crisis de violencia. Incluso tenía bajo su mirada un extraño video que sugería que la toma del canal habría sido pactada de antemano. Hace unas horas se supo que, poco antes de su muerte, investigaba el paradero de la mujer de Fito, Inda, quien por entonces era hallada en Córdoba.

En Buenos Aires, el crimen del fiscal ecuatoriano fue utilizado por algunos medios argentinos para recordar la muerte del fiscal Alberto Nisman (ocurrida el 18 de enero, pero de 2015) un episodio con pruebas evidentes de suicidio, aunque sectores judiciales y mediáticos insisten en caratular de asesinato.

En Quito, hace unas horas, Jorge Viterti, de 41 años, quien se desempañaba como secretario de Fiscalías en el Ministerio Público, fue hallado muerto en Quito, tras caer de un 8° piso. La investigación no confirmó detalles de lo sucedido y qué relación tendría con el episodio de César Suárez.

Apunten, disparen…

Mientras, en diversas partes del mundo, en especial en el norte, una serie de artículos sugestivamente direccionados en el mismo sentido, presentaban títulos que sugerían la responsabilidad de Rafael Correa de haber legalizado pandillas en Ecuador durante su gobierno, pero en los textos no lo sustentaban, o más bien justificaban la acción del entonces gobierno de Alianza País (2007-2017).

Justamente a poco de asumir, el entonces presidente del país enfrentó a las pandillas callejeras y a las más violentas con una política inédita con la intención de dar una respuesta a la creciente ola de reclamos por el incremento de la violencia y de los homicidios. «Se estableció una especie de nuevo contrato social en que el Estado se comprometía con la ciudadanía a través de mayores recursos en bienestar, salud y educación, y a cambio, esperaba que los ciudadanos cumplieran con sus obligaciones y responsabilidades construyendo cohesión comunitaria y reforzando la relación entre Estado y sociedad civil». Se trata de una explicación de David Brotherton, experto en bandas latinas de la Universidad Municipal de Nueva York.

Se le atribuye a Correa que lejos de atacar a esas bandas, negoció con ellas, las legalizó y creó una red para darle apoyo social, formación y trabajo a los pandilleros. En definitiva, según cifras que arrojan informes de organismos de las Naciones Unidas, la tasa de homicidios en Ecuador bajó una tercera parte durante la década que Correa ocupó el sillón presidencial en el Palacio de Carondelet. Llegó al gobierno cuando en el país había 18 homicidios cada 100 mi habitantes. Al irse, la tasa había descendido a 8. Durante el 2023, un año de particular grado de violencia, el valor registrado fue récord: 44.

Las tropas patrullan las calles.
Foto: Prensa AFP

Dándole la espalda a esta realidad, Mónica Palencia, una ministra del gobierno actual de Daniel Noboa, desde Quito declaraba a una radio de la Argentina que los pactos de paz de Correa fueron una «entrega del país». Incluso el propio flamante presidente hizo una acusación ambigua (“Creo que durante el gobierno de él [Correa], no voy a decir que fue él, el que sembró la semilla, pero durante su mandato empezaron a instaurarse estos grupos, estos grupos hoy en día narcoterroristas muy poderosos”), que en algunos casos se transcribieron como “duras imputaciones”.

Correa respondió por redes o por donde pudiera con frases como “vuelven las mentiras de los mediocres”, o más concreto: “Creer lo imposible y negar lo evidente. Ya hace siete años que no somos gobierno”. Al mismo tiempo, reconoció la existencia de “un conflicto armado interno” y llamó a los grupos actuales como “organizaciones terroristas y actores no estatales beligerantes”. 

Compartir

Entradas recientes

Máximo Kirchner: «No van a poder borrar lo que significó Cristina para millones de argentinos»

El diputado nacional habló sobre la interna peronista y el futuro de la expresidenta.

7 horas hace

El Ministerio de Salud anunció 110 nuevos despidos en el Hospital Posadas

“Se trata de personas que directamente no iba a trabajar” acusó la cartera a cargo…

7 horas hace

Weretilneck se alineó con la Corte y respaldó la proscripción de CFK: «En una república las reglas se respetan»

El gobernador de Río Negro, que logró su reelección aliado al peronismo, tomó la misma…

7 horas hace

Kicillof pidió a su tropa redoblar la defensa a Cristina y “no caer en provocaciones” 

El día después de la condena, el gobernador reunió a su mesa política para analizar…

8 horas hace

Por el fuerte operativo policial en Congreso, los jubilados fueron a Plaza de Mayo y confluyeron con el conflicto del Garrahan y otros sectores

La marcha de los miércoles se dirigió al centro del poder político y se unificó…

9 horas hace

Las industrias culturales y creativas: una oportunidad clave para el desarrollo de Argentina

Nuestro país, con su riqueza cultural y talento reconocido internacionalmente, cuenta con una ventaja comparativa…

9 horas hace

Espert fue repudiado en la UCA por calificar a Florencia Kirchner como «hija de una gran puta»

El precandidato a diputado libertario por la provincia de Buenos Aires lo expresó durante una…

10 horas hace

Tras la derrota electoral, el gobierno porteño gastará casi $9 mil millones en encuestas de opinión pública

Sin brindar mayores detalles, el monto millonario se repartirá entre 24 consultoras para la realización…

10 horas hace

Advierten que la reestructuración del INTA afectaría el desarrollo del cannabis medicinal y el cáñamo industrial

El sector que venía desde hace años en expansión sufrió un freno desde que asumió…

10 horas hace

Ricardo Ragendorfer: “Polosecki le daba voz a los sin voz, todo lo contrario a los ridículos de Jony Viale, Majul y Trebucq”

El reconocido escritor participará de un merecido homenaje a "Polo". Aquí reflexiona sobre la ética…

11 horas hace

Futbolistas salieron a «bancar» a Cristina Kirchner tras la condena de la Corte

Luego de conocerse el fallo del Máximo Tribunal, varios jugadores mostraron su apoyo: Komar, Vizcarra,…

11 horas hace

Ciro Annicchiarico: «Es un fallo político partidario e inconstitucional, no tiene argumentos»

El abogado especializado en Derechos Humanos explicó que hay muchísimas otras causas de gravísima responsabilidad…

12 horas hace