Mientras Larreta promete que en su presidencia todos los días habrá clases, una escuela porteña está cerrada por falta de agua

En las últimas semanas, gran parte de la sociedad es testigo del paso a paso de la interna PRO entre Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta. En ese marco, hubo varios enfrentamientos vía redes sociales y respuestas con delay en entrevistas radiales o televisivas. Situaciones que  llaman la atención de un sector importante de la audiencia que observa con detenimiento la supuesta grieta existente entre integrantes del mismo espacio político.

Desmentidas, ataques y mucha virulencia entre bandos, que disputan puertas adentro la candidatura a la presidencia. El miércoles de esta semana, ocurrió un fuerte choque entre Soledad Acuña y Patricia Bullrich. La segunda sostenía que en la Ciudad hubo días sin clases por los paros de maestros y maestra y la titular del Ministerio de Educación de CABA salió al cruce.

Más allá de los vericuetos discursivos plasmados por los diferentes candidatos y candidatas, en la Ciudad de Buenos Aires, la mayor cantidad de días sin clases no ocurre por las medidas de fuerza de las y los docentes. Entre las principales causas se encuentran: los problemas de infraestructura edilicia, la falta de docentes y, en los últimos años, la invasión de ratas. Este jueves, mientras Rodríguez Larreta prometía en la provincia de San Luis que con él se acaban los días sin clases por culpa de los paros docentes, en la Ciudad que “gobierna”, hay una escuela porteña que está cerrada hace tres días por falta del suministro de agua.

Se trata de la Escuela 21 DE 10 Cornelio Saavedra ubicada dentro del parque. Desde el lunes pasado y hasta el martes de esta semana, los estudiantes asistieron a clases porque Educación no quería suspender el ciclo lectivo. Las y los alumnos asisten a jornada completa, es decir, durante ocho horas no podían utilizar los baños de la escuela y tenían que salir del establecimiento para utilizar los sanitarios de un centro deportivo que queda al lado.

“Si los argentinos me honran eligiéndome presidente, los chicos van a estar en el aula. Vamos a declarar la educación servicio esencial. Las escuelas van a funcionar siempre. Las clases no se suspenden más. La educación es sagrada, yo por la educación me planto y me la banco”, enfatizó Larreta este jueves al encabezar un acto en la provincia de San Luis, considerada la primera escuela pública que fundó Domingo Faustino Sarmiento.

En la escuela de Saavedra hace dos semanas que los estudiantes carecen del suministro de agua. En varias ocasiones la empresa Aysa se acercó al lugar y determinó que el agua llega correctamente a la puerta de la escuela, que el inconveniente debe encontrarse dentro de la bomba de agua ubicada en el establecimiento. Todo lo que se encuentra puertas adentro de la escuela, es propiedad del ministerio porteño que, como en el resto de las obras edilicias, es quien debe ordenar y ejecutar el cambio de esa bomba de presión de agua.

“Desde el lunes de la semana pasada la escuela está con problemas de agua. Aysa vino varias veces porque pensó que el problema podía venir de ahí pero determinó que no era culpa de Aysa sino del sistema interno. También un día de la semana pasada vino la empresa tercerizada que trabaja para la Ciudad, dijo que arregló la bomba pero a las pocas horas el agua se cortó otra vez”, señala a Tiempo Margarita Daza, mamá de un estudiante de la escuela Cornelio Saavedra.

“Todos los días de la semana pasada los niños estuvieron yendo a la escuela comiendo en el comedor porque es una escuela de jornada completa y sin poder usar los baños”, continúa Daza, “estuvieron usando los baños de un espacio que es un campo deportivo que está al lado de la escuela y fue muy difícil porque los niños tuvieron que trasladarse fuera del establecimiento para poder acceder a esos baños”, agrega

Pese a la negativa de la cartera de educación de no suspender las clases, el martes de esta semana, la comunidad educativa decidió no enviar a sus hijos. Las familias, docentes y el equipo directivo de la escuela, todavía siguen esperando que se presente la empresa que realiza los trabajos de mantenimiento dentro de los edificios escolares y solucione el problema.

Mientras tanto, en campaña…

Al mismo tiempo que los chicos estaban sin clases, Rodríguez Larreta prometía en la provincia cuyana, que uno de sus principales objetos de campaña es para que los alumnos dejen de ser rehenes de la política: “Hoy estamos condenando a nuestros chicos. No podemos mirar para otro lado, no podemos dejar de ver la tremenda decadencia educativa a la que nos han arrastrado la mala política de los últimos años. En vez de estar en las aulas, nuestros hijos son rehenes de la política. Este sistema no va más. Queremos que la educación pública sea sinónimo de libertad y de progreso”.

Y declaró que en una supuesta presidencia, declarará a la educación un servicio esencial. “Tenemos que lograr que el derecho a la huelga no esté por encima del derecho de los chicos a aprender. Las escuelas van a estar abiertas siempre como pasa con el sistema de salud”, concluyó.

Días sin clases en CABA

Pese a las acusaciones de mandatarios de Juntos por el Cambio contra los gremios docentes, la mayor cantidad sin días de clases en escuelas porteñas ocurre por problemas de infraestructura y mantenimiento escolar, pero esencialmente por la falta de maestras y maestros en las escuelas. Una situación que se profundizó durante la última gestión de Rodríguez Larreta tras el vaciamiento progresivo de los institutos de formación docente.

En junio de 2022, Tiempo alertó sobre la falta de maestros y maestras en el distrito. En aquel entonces, el recorte realizado fue en dos semanas de clases, con cifras oficiales obtenidas de la base de datos de la plataforma de Actos Públicos de la Ciudad. Cada acto público quedó con un promedio de 450 cargos vacantes sin cubrir en el nivel primario.

Ante esta situación, en septiembre de 2022, la legisladora porteña del Frente de Todos, Maru Bielli, lanzó un contador de horas sin clase por falta de docentes en CABA: en dos semanas relevaron 20.235 horas en donde miles de estudiantes de secundarios porteños no tuvieron jornada escolar, y un promedio diario de casi 200 cargos docentes sin cubrir en el nivel primario. El mayor déficit de profesores se da en idiomas, Física, Química y Matemática y hay escuelas que durante todo un año transitan materias sin cubrir. Por ejemplo, en primaria quedan 1587 horas semanales en promedio sin cubrir de Inglés y en secundaria, 707 horas de idiomas.