Hay una birome gigante, el Premio Vil. Es el símbolo de la firma de Héctor Magnetto con los dictadores para el traspaso de las acciones de Papel Prensa. Hay cerca de 500 personas este miércoles por la tarde en la esquina de Finochietto y Piedras, a metros de la redacción de Clarín, el diario del Grupo de Magnetto. En esa esquina, en 2008, un grupo de trabajadores de prensa colocó un mural de Ana Ale, periodista y delegada despedida de Clarín, como recuerdo a su labor sindical. Esa fue una de las imágenes más fuertes del acto de repudio a los responsables de la apropiación de la empresa Papel Prensa.

En un camión que funcionaba como escenario, pasaron militantes de las organizaciones de derechos humanos HIJOS, Abuelas de Plaza de Mayo y familiares de víctimas del terrorismo de Estado, porque el traspaso se hizo en plena dictadura, en 1976. Además, desfilaron diferentes figuras del ámbito político. “Nunca hubiese creído que iba a estar acá en este momento, en la esquina del diario que hizo lo que hizo -dijo Lidia Papaleo, la viuda del banquero David Graiver, quien era el dueño de Papel Prensa-. Esto es una demostración que se puede enfrenar a la injusticia y es un homenaje al recuerdo de David. Estoy muy emocionada con la juventud que tenemos”. Lidia Papaleo estuvo acompaña por su hermano, Osvaldo, y la actriz Carolina Papaleo, su sobrina.

El periodista y abogado Pablo Llonto, autor del libro La Noble Ernestina, que cuenta la historia de la dueña del emporio Clarín, Ernestina Herrera de Noble, dispensó unas emotivas palabras en la esquina que lleva el nombre de quien fuera su mujer. “Esta es un equina de amor y de lucha”, dijo, de entrada, y agregó: “Si bien en el único milagro en el que creo es en Milagro Sala, espero otro milagro: que Magnetto, Ernestina y Mitre sean llamados a declarar por la causa Papel Prensa”. También le habló a su esposa: «Te seguimos amando, Negra querida». A su alrededor había carteles con los siguientes mensajes: “Clarín escribe con sangre”, o “El gran genocida del pueblo”, todo con la misma tipografía que utiliza el diario.

Estuvieron presentes en el acto, también, el militante Luis D’Elía; Hugo Yasky, secretario general de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), quien hizo mención a las presiones que recibió el ex juez Carlos Rozanski para presentar su renuncia, como operaciones de prensa del Grupo Clarín; Roberto Baradel, titular del Sindicato Único de Trabajadores de la Educación de la provincia de Buenos Aires (SUTEBA); y Rafael Ianover, ex vicepresidente de Papel Prensa, quien sostuvo, emocionado: “Esto me permite recordar a David, que sufrió un despojo absurdo y vergonzoso. Tiene razón estos carteles. Clarín se escribe con sangre”.