Tras la definición de medidas de fuerza por partes de las patronales del agro en rechazo al cierre de exportaciones del maíz, el presidente Alberto Fernández les pidió solidaridad y que garanticen a los argentinos los alimentos que consumen.

“Estoy en una lucha con la producción de alimentos en Argentina. El mundo demanda alimentos entonces los precios suben, aumenta la soja, el trigo y el maíz”, señaló el mandatario en diálogo con Radio con Vos y agregó: “No estoy en una economía normal, estamos en una situación de emergencia y hay que ocuparse de los que menos tienen”.

“Por principio de solidaridad les estoy planteando que garanticen al argentino lo que consume y que le cobren lo que corresponde. El resto, que exporten todo lo que quieran al precio que se le dé las ganas”, explicó Fernández, sobre la decisión de cerrar la exportación del maíz para garantizar el abastecimiento interno.

“Entiendo que el maíz ha crecido mucho y es una gran oportunidad de exportar maíz, lo que no entiendo es por qué a los argentinos le tienen que cobrar el maíz del mismo modo que se lo cobran a otro que lo quiere comprar en otra parte del mundo”, se preguntó y añadió: “Si producen en pesos, por qué el argentino tiene que pagar el kilo de asado como lo paga un chino o un francés”.

Durante la entrevista, el presidente se refirió además a los pedidos de las prepagas para aumentar los precios así como un posible aumento de tarifas.

«Si por nosotros fuera, no tocaríamos las tarifas. Tengo claro que podemos ir a un sistema segmentado en el que paguen más los que pueden pagar más. Estamos renaciendo de las cenizas y todo lo que podamos hacer para cuidar el bolsillo lo vamos a hacer. No sé de dónde salió que hay una discusión respecto a las tarifas», señaló.

Sobre las prepagas, aseguró que “no están las condiciones para favorecer aumentos” en la salud privada.

“Estamos en una situación particular. Una de las cosas que más me cuesta entender como presidente es que yo hablo de gobernar un país en pandemia y me contestan como si estuviera gobernando un país normal: esto no es un país normal, es un país en pandemia, un mundo en pandemia», sostuvo.

Al ser consultado sobre la posibilidad de concederle un indulto a dirigentes perseguidos judicialmente, el presidente hizo una diferencia entre indulto y amnistía. “Si quieren indultar a los procesados, eso es una amnistía y depende del Congreso, no de pende de mí. Para que haya indulto, tiene que haber alguien condenado”, aseguró.

Recordó que durante la campaña prometió que no iba a indultar a nadie y que planea cumplirlo.  “Yo a la palabra le asigno un valor central y lo voy a cumplir”.

“Yo no soy quién para perdonar. Lo que sí creo es que en estos últimos cuatro años hubo muchos procesos que están colmados de nulidades. Le pido a la justicia que los revise porque hay cosas que no están bien», añadió.