Inconsulta, sorpresiva y arbitraria, así considera la comunidad educativa de la Escuela de Cerámica N° 1, ubicada en Bulnes 45, en el barrio de Almagro, a la decisión del Ejecutivo porteño de trasladarla a Mataderos, y se ha propuesto resistir.

Se enteraron el lunes 26 de noviembre, por un email que envió al colegio la directora de Educación Artística de la Ciudad, Helena Alderoqui. A pocos días de la finalización de clases y a semanas de la aceptación de nuevos ingresantes, «nos vemos avasallados por una disposición que disfraza de conveniente una mudanza unilateral e impuesta, que partiría nuestra escuela en dos, la sacaría de su barrio, en el que tiene un significado cultural e histórico y donde es la única con modalidad artística, y obligaría a nuestrxs chicxs a utilizar varios medios de transporte para llegar», dice Cecilia Paul, mamá de una alumna de cuarto año.

Lo increíble de la decisión es que ocurre en momentos en que hay en la Legislatura un proyecto –con el aval de 22 legisladores– para expropiar y anexar el predio lindero a la Escuela de Cerámica, producto de un viejo reclamo de la comunidad de ampliar los espacios áulicos para potenciar la propuesta pedagógica de una institución fundada en 1940, que fue la casa taller del maestro Fernando Arranz y por la que pasaron artistas como Antonio Berni, Lino Spilinbergo y Antonio Pujía. «Es un bien cultural e identitario de Almagro que las familias eligen para que sus hijos cursen el secundario. El 80% de la matrícula pertenece al barrio. Un traslado a otra sede a 7 kilómetros destrozaría nuestro plan de vida», explica Paul.

Para el Ministerio de Educación, la mudanza es un hecho y el llamado «Polo de las Artes», en Juan Bautista Alberdi 4139, albergará desde 2019 tanto a la Escuela de Cerámica N° 1 como a la de Artes Visuales «Rogelio Yrurtia».

El jueves pasado, poco antes del mediodía, Alderoqui y su jefa, Marcela Pelanda, directora de Educación Superior del ministerio que conduce Soledad Acuña, se presentaron en la escuela con la insólita intención de hablar sólo con los alumnos. «Los docentes se opusieron y al rato llegamos los padres. Fue una situación extraña, bastante angustiante. Nos están llamando individualmente, pero este reclamo, ‘Ampliación Sí, Traslado No’, lo llevamos adelante entre todos».

Este lunes a las 17, la comunidad educativa del «Cera» hará una sentada con corte de tránsito en Rivadavia y Bulnes, y a las 19 habrá una asamblea de alumnos, padres y docentes. «