La llegada de la pandemia arrasó de manera inmediata con la continuidad de múltiples proyectos en términos internacionales y locales. Pocos días antes de la declaración formal por parte de la Organización Mundial de la Salud, la directora cinematográfica Lucrecia Martel se encontraba a todo vapor terminando ciertos aspectos finales de Chocobar (una coproducción realizada entre Argentina, Holanda y los Estados Unidos) que representaría el nuevo film de la directora, el sucesor de Zama, estrenado en septiembre de 2017.

La realización de Chocobar como un film de notorio carácter documental, había comenzado a realizarse en 2018 tras una extensa tanto como exhaustiva investigación histórica previa, pero la irrupción del Covid-19 en la vida de todas las disciplinas del planeta obligó a una detención feroz miles de actividades, y entre ellas el proyecto que dirigía Martel no fue la excepción.

El trabajo de la directora vuelve a tomar impulso al haber sido seleccionado (junto a otros diez proyectos del mundo) para recibir una ayuda económica del prestigioso festival de Locarno, en Suiza.

Afectado por las condiciones sanitarias que rigen al planeta, lo cierto es que el festival suizo(cuya primera edición data de 1946) suspendió todas sus actividades, pero como contrapartida eligió a estos filmes (que fueron seleccionados entre un total de 545 producciones) para ofrecerles un premio de 70 mil francos si alguno de ellos resulta el elegido.

“La inquieta inventiva directora argentina Lucrecia Martel describe su primera película de no ficción como un documental híbrido y creativo sobre el asesinato del activista indígena Javier Chocobar por un terrateniente blanco. Después de una década de investigación, Chocobar estaba en una etapa clave de producción cuando se interrumpió”, sostuvo Nicholas Elliot en representación del afamado festival. Para dar con el ganador del estímulo económico que ofrecerá el evento, las autoridades del evento anunciaron que se formará un jurado especial que anunciará al ganador en la última fecha del festival. El público en general tendrá la posibilidad de observar el trabajo inconcluso (que incluye una sinopsis e imágenes no de corte final) desarrollado hasta el momento por parte de los realizadores, como así también las películas que formarán parte de la competencia formal online de este año a desarrollarse del 5 al 15 de agosto próximo. Así entonces, las películas e instancias de Locarno 2020 podrán ser vistas mediante el sitio web del festival suizo enwww.pardo.ch. Allí, más de una docena de films competirán por el Leopardo de Oro, Plata o Bronce; estatuillas distintivas de la competencia.

Volviendo al nuevo film de Martel, el largo camino de realización de esta nueva producción comenzó dos años atrás cuando la directora decidió filmar un documental sobre el caso de Javier Chocobar, un activista indígena del norte de nuestro país que fuera asesinado en 2009 a la edad de 68 años. Quien perpetuó el asesinato fue un terrateniente de la provincia de Tucumán cuando Chocobar intentó ingresar por la fuerza a las tierras que le pertenecieron a su comunidad por varias generaciones. El asesino, que buscaba explotar la tierra para un entero propósito personal, fue condenado a la pena de 22 años de prisión en octubre de 2018.

La realizadora, célebre localmente por haber dirigido films como “La Ciénaga”, “La niña santa” y “La mujer sin cabeza” (entre varias otras) nació en Salta,y en más de una oportunidad ante la prensa declaró conocer muy bien las problemáticas ligadas a la tierra que rigen en el norte de nuestro país. De alzarse con el incentivo económico provisto por el festival de Locarno, la directora y sus productores podrían tener listo Chocobar para su exhibición en la segunda parte del próximo año.