El juez federal Claudio Bonadio volvió a procesar con prisión preventiva a la expresidenta Cristina Fernández. Esta vez adoptó la medida en una causa derivada de la investigación de las fotocopias de los cuadernos. Con esta nueva resolución, el magistrado ya acumula diez procesamientos contra la principal dirigente de la oposición con seis pedidos de detención preventiva.

La decisión del juez alcanzó a la exmandataria y a un grupo de más de cien personas entre exfuncionarios y empresarios. Están incluidos el exministro Julio De Vido y el financista Ernesto Clarens, entre otros. La causa está denominada como “cartelización” de la Obra Pública y los “corredores viales”. Son apartados derivados de la cuestionada investigación de las fotocopias de los  cuadernos.

Por otra parte, el empresario Gianfranco Macri, hermano del presidente Mauricio Macri, recibió la falta de mérito en el expediente que investiga el supuesto pagos de coimas en el área de los peajes. En tanto que sobre el fallecido Franco Macri, padre del mandatario, se declaró extinguida la acción penal. Tanto Gianfranco como Franco habían sido citados a indagatoria en diciembre pasado, pero el patriarca del clan Macri no pudo presentarse por su estado de salud.

En la lista de los alcanzados por la decisión del titular del juzgado federal número 11, pero sin prisión preventiva, están el ex titular de la Cámara Argentina de la Construcción, Carlos Wagner, y a los empresarios Aldo Roggio, Eduardo Eurnekián, Osvaldo Acosta, Juan Chediak, Ángel Calcaterra (primo del presidente), Javier Sánchez Caballero, también cercano a las empresas de la familia Macri, y Juan Carlos de Goychoechea.

De los 12 procesamientos que recaen sobre Cristina Fernández en diferentes causas, diez  provienen del juzgado de Bonadio.