El candidato del MAS Luis “Lucho” Arce, exministro de Economía del gobierno de Evo Morales, se encamina a ser el nuevo presidente de Bolivia a un año del golpe que obligó el exilio del entonces jefe de Estado y que colocó a Jeanine Áñez como presidenta de facto.

Si bien el escrutinio avanza lentamente, en la mañana de este lunes apenas el 15% de los votos fueron contabilizados, el MAS ya comenzó a celebrar una contundente elección que le permitió superar por más de 20 puntos al candidato de la derecha Carlos Mesa, según los boca de urna difundidos en la noche del domingo.

Arce y Morales proclamaron la victoria pasada la medianoche y Áñez reconoció el triunfo públicamente y felicitó a Arce a través de redes sociales. Mesa, por su parte, evitó pronunciarse hasta este mediodía, cuando reconoció la derrota electoral y prometió ser «una oposición constructiva».

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Bolivia «ha recuperado la democracia, quiero decirle sobre todo a los bolivianos, hemos recuperado las esperanzas», declaró Arce, junto a su vicepresidente, David Choquehuanca, excanciller de Morales (2006-2019), y agregó: «Mi compromiso (es) trabajar, de llevar adelante nuestro programa y como lo venimos diciendo vamos a trabajar para todos los bolivianos y vamos a construir un gobierno de unidad nacional, vamos a construir la unidad en nuestro país».

«Lucho será nuestro presidente (…), él devolverá a nuestra patria el camino del crecimiento económico», dijo Morales desde su exilio en la Argentina durante la noche del domingo. Este lunes, el exmandatario destacó: «A un año del golpe, recuperamos el poder político democráticamente con la conciencia y la paciencia del pueblo», y agregó: «Hemos vuelto millones».

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Según el canal de televisión Unitel, Arce se adjudicó en primera vuelta la presidencia con 52,4% de los votos, muy por encima del 31,5% de Mesa, su inmediato rival. En tanto, la fundación Jubileo dio a Arce el 53% de los votos y a Mesa el 30,8%.

Ambas encuestas privadas pusieron fin a la incertidumbre que imperaba en el país siete horas después del término de la votación, sin que las autoridades electorales informaran sobre los resultados preliminares.

El artífice del milagro económico boliviano

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(Foto: ABI)


Economista de 57 años, Arce estudió en la estatal Universidad Mayor de San Andrés, en La Paz, e hizo una maestría en la universidad británica de Warwick.

Trabajó 18 años en el Banco Central, donde ocupó diversos cargos, y fue ministro de Economía y Finanzas casi todo el periodo de Morales, con una pausa de 18 meses. Tiene un perfil más tecnócrata que político pero se le reconoce haber sido el artífice del milagro económico en el gobierno de Evo Morales.

En esos años, Bolivia elevó su Producto Interno Bruto de 9.500 millones de dólares anuales a 40.800 millones y redujo la pobreza del 60% a 37%, según datos oficiales.

La bonanza permitió pagar bonificaciones a miles de mujeres embarazadas, escolares y ancianos, e inversiones millonarias para intentar industrializar loa explotación del litio y el gas natural.

Sin embargo, deberá asumir en la crisis económica más profunda en casi 40 años del país andino, con una contracción prevista del PIB de 6,2% en 2020.

Las elecciones

Arce y Mesa eran los candidatos favoritos en esta votación desarrollada en una jornada tranquila, aunque envuelta en temores a que se repitieran los incidentes tras los comicios de octubre de 2019 que terminaron en el golpe de Estado a Morales y en su exilio.

Las autoridades electorales decidieron a última hora suprimir en estos comicios el conteo rápido, basado en la transmisión de las actas de los colegios electorales por foto.

Unos 7,3 millones de electores estaban llamados a votar y lo hicieron en un ambiente tranquilo pese a las tensiones de la campaña, con las ciudades bajo resguardo militar y policial.

También se renovaron los 166 escaños del Congreso bicameral.

La votación fue más lenta y no hubo rastro del tinte festivo de otros tiempos, con puestos de venta de comida típica, helados, globos, juegos para niños y música afuera de los centros electorales.