Muchas voces se oyen por estas horas en el debate por la estrategia de «flexibilización laboral» de parte del Gobierno. Una nueva, muy polémica, es la del propio secretario de Empleo, Miguel Ángel Ponte, quien afirmó, sin cortapisas: «Contratar y despedir debería ser natural como comer y descomer».

Ponte es uno de los funcionarios macristas que migró del sector privado a la función pública. Fue director de Recursos Humanos de Ternium Siderar, un hombre de Techint, el holding de Paolo Rocca. Experto en relaciones laborales y en Recursos Humanos. Entre sus aportes a la gestión de Cambiemos puede exhibir el polémico proyecto de Primer Empleo.

Pero no sólo eso. En octubre pasado, el anuncio oficial del Indec sobre la pérdida de 118 mil puestos de trabajo en el sector privado encontró “al mejor equipo para el Empleo”, como se autodefinen los funcionarios del Ministerio de Trabajo bailando en el 2° Encuentro de Empleo y Capacitación Laboral en el hotel Holliday Inn de la capital cordobesa. Unos 60 funcionarios nacionales de distintos puntos del país se reunieron en el hotel Holliday Inn. Fue justamente Miguel Ángel Punte, uno de los que más lució su cadencia espástica para el baile junto al director regional de la cartera laboral, Gonzalo Santamarina, y un puñado de hombres y mujeres, quienes vibraron sobre la tarima de un boliche a puro reggaetón. La anécdota hubiera sido graciosa si no se tratara de Ponte, en un contexto social crítico, a horas de que su jefe político se reuniera con Francisco, el mismo Pontífice que pidió “ponerse la Patria al hombro”. No fue precisamente lo que Ponte se puso al hombro esa noche.

Ahora ese mismo funcionario, en diálogo con «Radio con Vos», aseguró: «La única forma de integrar la educación con el mundo del trabajo es con prácticas formativas». Y poco después sostuvo que «la posibilidad de entrar y salir del mercado laboral hace a su esencia; es como comer y descomer». Y consideró que «el empleo no registrado en Argentina es un drama y para el Gobierno es un tema prioritario; la competitividad requiere costos razonables».

El secretario de Empleo y ex CEO del grupo Techint, agregó en el marco de instalar el sistema de pasantías: «Si todos ellos no pueden tener una fluida presencia de aprendizaje en el mundo del trabajo y de las empresas, tampoco vamos a tener la posibilidad que aunque haya trabajo, de que haya empleabilidad sobre estas personas».

Ante estas declaraciones, la primera reacción fue la del titular de la Central de los Trabajadores Argentinos (CTA) Autónoma, Pablo Micheli, quien consideró que para concretar la flexibilización laboral el Gobierno necesita «tener alguna complicidad sindical». Y en el mismo sentido reclamó nuevamente “un paro nacional a la CGT en defensa propia de los trabajadores”.