Este jueves 17 de octubre, justo el mismo día en que se recuerda el Día de la Lealtad del peronismo, la Asociación Personal Técnico Aeronáutico (APTA) realizará sus elecciones para definir a sus autoridades, entre ellas al próximo secretario general.

La particularidad de este llamado a elecciones es que el actual secretario general, Ricardo Cirielli, quien dirige el gremio desde el año 1992, va por una nueva reelección a través de la Lista Naranja. Su postulación se enfrentará con una oposición unida en la Lista Celeste que postula a Alberto Salas, abogado laboralista y delegado de línea. Según observadores que conocen el sector aeroportuario, la polarización entre los dos sectores hará mucho más pareja la elección. Se habla, incluso, hasta de un resultado incierto.

Con alrededor de 3500 afiliados en todo el país, APTA es uno de los sindicatos estratégicos para la actividad aeroportuaria en la Argentina. Fundada en 1963, el gremio agrupa a los mecánicos de aviones como también a los empleados encargados del despacho y retiro de equipaje (desde funciones técnicas a especialidades previstas en el código aeroportuario). La elección sindical en APTA es importante para una actividad que está atravesada por discusiones y controversias.

La disputa entre el oficialismo de la Lista Naranja y los retadores de la Lista Celeste (que agrupa a cuatro agrupaciones opositoras aliadas en un frente) se dará en el marco de crecientes reclamos por retraso salarial pero también por el descontento que produjo la política oficial de Cambiemos, caracterizada por la desinversión estatal en Aerolíneas Argentinas, la pérdida de rutas claves frente a la competencia directa y el fomento a las aerolíneas privadas y extranjeras de tipo low-cost. 

Dirigente de APTA durante décadas, con un paso por el kirchnerismo como funcionario durante la primera etapa, Cirielli supo tener una relación bastante estrecha con referentes de peso del sindicalismo, incluso algunos que estaban distanciados entre sí: léase, por ejemplo, Hugo Moyano y, sobre todo, Luis Barrionuevo. Cirielli también dedicó frases muy duras contra Néstor Kirchner y Cristina Fernández y se convirtió en un enemigo declarado de Mariano Recalde cuando el hoy candidato a senador nacional dirigió Aerolíneas Argentinas.

En estos últimos tiempos, sin embargo, las relaciones políticas de Cirielli se enfriaron. Incluso el propio Moyano lo excluyó de la comisión directiva del Club Atlético Independiente, club del cual es hincha. El jueves se define su futuro.