«No me arrepiento porque nunca hemos dejado una obra inconclusa, firmado contratos con sobreprecios ni pagado coimas», dijo el empresario a través de una carta difundida por su familia. Sus allegados aclararon, además, que Ferreyra «en ningún momento» entabló negociaciones con el fiscal Carlos Stornelli para acogerse al programa de «arrepentidos» que alimenta el expediente. Ferreyra se encuentra detenido desde hace casi un mes por orden del juez Claudio Bonadio, acusado de integrar una «asociación ilícita». A contramano de la mayoría de los empresarios acusados, quienes se acogieron al programa de delación premiada y recuperaron su libertad luego de ser declarados «imputados colaboradores», el vicepresidente de Electroingeniería se declaró inocente y rechazó la imputación.