“Soy intendente de Tornquist estoy en Cambiemos, pero así no podemos seguir más”. Así comienza el relato de Sergio Fabián Bordoni, el jefe comunal del partido de Tornquist, al sudoeste bonaerense, ganador de las elecciones del 2015 por el frente macrista, y que hoy se convierte en uno de los primeros arrepentidos, aunque aclaró que seguirá en la alianza oficialista.

El descargo fue subido a su perfil en Facebook este viernes, donde afirma: “Estamos oprimiendo a la clase media y baja de nuestro país, se había dicho que por este año no iba a ver más aumentos, y seguimos con aumentos en los combustibles, que afectan directamente y se trasladan a los alimentos, no con esto quiero sacar los pies del plato, pero quiero que entiendan nuestros gobernantes, que somos muchos los intendentes, que pensamos así, el tema es que muy pocos se animan a decirlo”.

El texto concluye: “Yo lo he dicho dónde corresponde, pero no he sido escuchado, el Interior es el más castigado con estos aumentos, por favor piensen en la gente que confío en nosotros y cada vez les alcanza menos para vivir, y cuando digo vivir, es con lo mínimo e indispensable, reflexionemos antes de que sea demasiado tarde, quiero sumar y no restar, pero entendamos que la gente no da más”.

A lo largo de su trayectoria política Bordoni se ha acostumbrado a cambiar. Integró el Consejo del Partido Justicialista en 1995, en 2009 pasó a la Coalición Cívica donde logró una banca en el Concejo Deliberante, y cuatro años después la renovó, pero como integrante del Frente Progresista Cívico y Social. En 2015 ganó la Jefatura Comunal con el 47%, representando al macrismo, y anunciando que los principales puntos de su gobierno iban a girar en torno de la promoción del turismo, la construcción de viviendas y la generación de empleo. Entre el ajuste, la devaluación y la crisis, nada de esto sucedió. Hoy en Cambiemos ya lo consideran un «traidor».