Con el foco puesto en la historia de dos trabajadores golondrina, un equipo teatral se topó con una historia tan atrayente que lejos estuvieron de separarse de ella. En Hombres y ratones (la obra dirigida por Lisandro Fiks y Gustavo Luppi que los viernes se materializa en el escenario de Portón de Sánchez), la trama de esos dos hombres que viajan por el país para cambiar su destino se volverá nuclear bajo los protagónicos de Juan Luppi (en el rol de Jorge) y Ramiro Sánchez Roy (como Lito).

En ese contexto, mucho pasará por la necesidad de juntar dinero para comprar una granja en La Pampa, aunque nada será sencillo como siempre dictan las apariencias. «Hacer teatro no es fácil en nuestro país, aunque en este momento nada es sencillo por esta parte del mundo. Si no fuese por el enorme amor que despertó en nosotros todo lo relacionado con la obra, esta jugada hubiese sido imposible. Pero acá estamos, desafiando lo que habitualmente pasa y contentos por hacer teatro más allá de las condiciones», sostiene Juan Luppi pocos días después del estreno formal de esta propuesta.

Basada en el libro de John Steinbeck que lleva el mismo nombre que la obra, localmente la adaptación corrió por cuenta de Lisandro Fisk. Con notable emoción, Luppi afirma que haber encontrado una historia como esta constituyó un antes y un después en su constante búsqueda de material teatral. «Para mí es precioso todo lo que cuenta el autor; inclusive fue él mismo que escribió la obra de teatro, con lo cual todo me terminó de cerrar. Me encargué de traducirla y Lisandro finalmente la adaptó, ya que la obra original gira en torno a lo sucedido en la gran depresión norteamericana. Pero lo que importa es que el libro habla de algo totalmente vigente en nuestros días, y que tiene que ver con la explotación del hombre y cómo el mundo se arrincona hacia un lugar donde no hay ningún espacio para la humanidad, para el afecto o el cariño. De eso habla la obra».

Ya en términos específicos de adaptación, lo local se vuelve preponderante y lo campestre de nuestra geografía toma un espacio central en cada uno de los personajes. «Darles forma a todos los roles para nuestro contexto social fue fundamental. Yo interpreto a un trabajador golondrina que viaja de manera errante por el país, pero siempre junto con Lito, el otro gran protagonista del texto. Ambos se tienen el uno al otro porque no tienen a otra persona más en el mundo, aunque hay que aclarar que no son amigos. En la soledad de ambos se hacen cierta compañía en el medio de nuestra Pampa, hablan y se escuchan. A la vez comparten un sueño en común: poder juntar dinero para algún día tener una chacra y dejar de ser peones para comenzar a ser jefes. Por eso también viajan juntos, porque saben que en esa unión pueden tener dos sueldos en vez de uno», aclara Luppi sobre la dinámica de los protagonistas centrales de la obra.

Para él, interpretar a un personaje como el que desarrolla en Hombres y ratones constituyó, más allá del texto, uno de los polos principales de atracción. «Jorge es el gran ejemplo de lo que se ve en el escenario. Algo ocurre con todos los que participan pero explicarte más de él sería contarte un argumento en el que está muy metido por un lado, pero por otro no quiero revelar ciertas cosas que deben verse con las actuaciones. Todos los roles viven en un mundo muy hostil que los perjudica por la naturaleza sensible que tienen».

Por otro lado, Luppi comparte escenario con su padre, Gustavo, algo que sucede por primera vez y que significa una instancia inesperada para el actor. «Es la primera vez que trabajo con él y me alegra coincidir en este proyecto. Él tenía ganas de volver a la actuación, lo llamé para dirigir la obra y luego terminó haciéndolo pero también codirigiendo con Fisk. Después de 27 años vuelve a subirse a un escenario, y para mí compartir este espacio es de mucha responsabilidad, pero es genial a la vez porque estoy conociendo al actor y compartiendo el mundo del teatro», concluye.  «

HOMBRES Y RATONES

Dirección: Lisandro Fisk y Gustavo Luppi. Actúan: Juan Luppi, Ramiro Méndez Roy, Gustavo Luppi, Lisandro Fisk, Sandra Criolani y Christian Álvarez. Viernes a las 23 en Portón de Sánchez, Sánchez de Bustamante 1034.