El Ministerio de Salud informó este sábado a la mañana que hubo 26 nuevos fallecimientos por coronavirus en el país, lo que elevó a 2.204 la cifra de muertos desde marzo pasado, con una tasa de mortalidad de 48 personas cada millón de habitantes y un índice de letalidad de 1,8% sobre los casos confirmados.

En el reporte oficial se indicó, además, que el viernes se registraron 4.518 los contagios de Covid-19 y el total de infectados es de 119.301, con una tasa de incidencia de 262 casos cada 100.000 habitantes.

El viernes se realizaron 12.472 nuevas muestras y desde el inicio del brote alcanzan las 531.753 pruebas diagnósticas, lo que equivale a 11.718,6 muestras por millón de habitantes.

La flexibilización

Entre las principales razones que el gobierno nacional presentó para comenzar una nueva etapa de flexibilización del aislamiento social y obligatorio, con una apertura escalonada de actividades, se apuntan la disminución en la velocidad de propagación de los casos de coronavirus, el incremento de la capacidad diagnóstica y la detección precoz, y la mejora en la capacidad de asistencia del sistema de salud en el país.

Así surge de los considerandos del decreto 605/2020 publicado este sábado en el Boletín Oficial, con la firma del presidente y de todos los ministros de su gabinete. El documento oficializa las medidas anunciadas el viernes y prorroga hasta el 2 de agosto el aislamiento en el Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA), en Jujuy y el departamento chaqueño de San Fernando; mientras que para el resto del país se impone la fase de distanciamiento social.

El decreto menciona que las medidas adoptadas por el gobierno nacional «han permitido mitigar la expansión» de la pandemia en el país, evitando «la saturación del sistema de salud, a diferencia de lo sucedido en otros lugares del mundo».

El Estado «no sólo ha mejorado e incrementado la capacidad de asistencia del sistema de salud, la adquisición de insumos y equipamiento y fortalecido el entrenamiento del equipo de salud sino que dispuso medidas para morigerar el impacto económico y social», dicen los considerandos de la norma conocida durante madrugada.

Se indica también que «la tasa de incidencia acumulada para Argentina es de 245 casos cada 100.000 habitantes, de las más bajas de la región americana», y que se redujo el tiempo de duplicación de casos. También se evaluó que «la efectividad del aislamiento ha logrado que más del 85% del país se encuentre en la fase de reapertura programada, progresando día a día con cada actividad que se va habilitando como excepción».

Entre los logros citados, el decreto menciona que «se incrementó un 41% la dotación de camas de terapia intensiva para adultos», y se dispusieron «29.485 millones de pesos a la atención de la emergencia».

Asimismo se desarrollaron «más de 350 estudios de investigación en el país de los cuales 63 corresponden a ensayos clínicos» así como cuatro dispositivos de diagnóstico con empresas y científicos nacionales; y se estimuló y apoyó la producción nacional de respiradores, alcohol en gel y elementos de protección.

Por otra parte, el desde el gobierno evaluaron que se consolidó y se capacitó a más de 13.000 voluntarios (profesionales y trabajadores de la salud, estudiantes universitarios y empleados estatales) que desarrollan acciones territoriales de atención; y se implementó el plan nacional de cuidado de los trabajadores de la salud. Asimismo se destaca que se implementó como estrategia de control de contactos estrechos “DetectAr” en provincias y municipios de todo el país.

Respecto de la crisis económica producida por la pandemia, el decreto menciona algunas acciones como el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE), el crédito a tasa cero para las trabajadoras y los trabajadores independientes registrados y la postergación o reducción de los aportes patronales, así como un salario complementario, en el caso del programa para la asistencia a las empresas y el trabajo (ATP). «A esto se sumó el pago de bonos especiales para los sectores más vulnerables y los que trabajan cotidianamente para prevenir y contener la epidemia», reseña el texto.