La suspensión del IVA en trece categorías de productos de la canasta básica de alimentos ayudará a amortiguar el salto en el índice de precios de agosto que publicará este jueves el Indec. Algunos estudios preliminares anticipan que en ese grupo de bienes hubo deflación, aunque si no se hubiera aplicado la rebaja impositiva su precio al consumidor final sería muy superior al de antes.

El decreto 567/19 se aplica a productos tales como pan, leche, aceite, pastas, arroz, yerba, azúcar, huevos, harina y yogures, entre otros. Desde agosto y hasta fin de año, dejaron de estar gravados con el Impuesto al Valor Agregado, con una alícuota de 21% (para un grupo reducido de bienes existe una alícuota diferencial de 10,5%). Sin embargo, las rebajas al público fueron de una magnitud mucho menor. De allí se desprende que el precio neto del bien aumentó de manera significativa.

Según la consultora Ecolatina, los rubros en los que se quitó el impuesto bajaron un 0,8% entre la segunda quincena de julio y la segunda quincena de agosto. El Instituto Estadístico de los Trabajadores, que funciona en el ámbito de la UMET (Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo), estimó la caída en 0,3%. Esas rebajas son mínimas en comparación al 17,3% de rebaja que hubieran conseguido los consumidores si el precio de esos bienes se hubiera mantenido (9,5% en el caso de los que tenían alícuota diferencial).

Esa tajada de entre 9 y 17 puntos de diferencia quedó en manos de los fabricantes, que ajustaron su precio de venta al minorista, o bien de los supermercados que recompusieron su margen de ganancia. El informe de Ecolatina abona esta última hipótesis señalando que la rebaja se notó mucho menos en autoservicios y almacenes que en las grandes cadenas de supermercados.

La eliminación temporal del IVA fue una de las “medidas de alivio para favorecer el consumo” que anunció el gobierno luego de la contundente derrota del oficialismo en las PASO y la subsiguiente devaluación. En esa dirección, este martes la Secretaría de Comercio Interior anunció la renovación por cuatro meses del programa Precios Cuidados, con un aumento de 4,66% con relación a lo pactado en mayo de 2019. En ese programa participan 106 empresas (el 64% de ellas son Pymes, según el informe oficial), que ofrecen 553 productos en 44 supermercados y 2.500 puntos de venta. En esta renovación se anuncia la incorporación al listado de yogures con cereales, legumbres, galletas de arroz y productos de higiene.

Aun así, en el sector privado estiman que la inflación de agosto oscilará entre 3,8% y 4,3%. Como la devaluación se produjo avanzado al mes y su impacto en los precios empezó a sentirse en la última semana, el pico de la nueva oleada inflacionaria se podría producir recién en el índice de septiembre.