Tres semanas después de haber sido encarcelado, el cabo Francisco Javier Pintos, acusado de haber matado a Rafael Nahuel, fue beneficiado por un nuevo fallo de la Cámara Federal de General Roca, que le otorgó la libertad.

A pesar de haber sido la misma cámara que había ordenado detenerlo en mayo, en un nuevo fallo firmado por Mariano Lozano, Richar Gallego, y Ricardo Barreiro, admitió un recurso de la defensa del Albatro y dispuso su excarcelación bajo caución juratoria, es decir, sin pagar fianza.

El juez Lozano sostuvo: “Si bien existen indicios categóricos de que Pintos fue quien disparó, y dio muerte, a Rafael Nahuel (y que) la prueba colectada fue suficiente para sostener el procesamiento de Pintos en los términos que describí, no parece del todo desechable la chance que tiene de que en el juicio que se le avecina su defensa sea receptada, si no para obtener su absolución tal vez sí para un cambio de calificación que lo lleve a tener que afrontar una condena de menor entidad; circunstancia que, a su vez, es un acicate para que prefiera mantenerse a derecho, antes que profugarse, ínterin se arriba a esa etapa”. Esto quiere decir que para el magistrado, cuando se lleve a cabo el juicio en su contra, podría disminuir la calificación por la que esa cámara lo procesó.

Además, el juez Barreiro sostuvo que no existe riesgo de fuga y recordó el principio de inocencia que rige en el derecho penal argentino. “Pintos no ha revelado ninguna conducta elusiva de sus responsabilidades procesales, ha estado todo el tiempo a derecho, cuenta con medios de vida comprobables pues es miembro de la Prefectura Naval y, en cuanto al arraigo que se ha considerado menguado, no veo que ello pueda ser un factor para denegar su soltura”, sostuvo.