Con 195 despidos, la cerealera multinacional COFCO cerró su planta de Valentín Alsina y adujo una supuesta crisis del sector, que desde el sindicato de aceiteros (SOEIA) se encargaron de desmentir. «Es una de las multinacionales alimentarias más grandes del mundo, que disputa en nuestro país con Cargill el primer puesto en exportaciones agrícolas. COFCO no muestra ningún balance que exprese la supuesta ‘crisis’. Por el contrario, lo único que demuestra cerrando su única planta de envasado y refinamiento para el consumo doméstico en el país es que su único interés es comprar el cereal sin industrializar para procesarlo en el exterior», se lee en un comunicado en el que además consideran nulos los despidos.

Mientras un grupo de trabajadores acampa frente a la planta, desde el sindicato confirmaron una reunión en el Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires para descular la situación. Los despedidos denuncian además una maniobra de la empresa de darle vacaciones en enero a casi todo el personal para minimizar el conflicto ante la medida de dejar a casi 200 familias sin su principal ingreso. Cabe destacar que los trabajadores se enteraron del cierre y de los despidos cuando intentaron ingresar a la planta a cumplir con sus tareas el viernes 4 de enero. Recién cuando tomó público conocimiento esta maniobra, COFCO emitió un comunicado en el que intentaba explicar la situación.

«Que la patronal sepa que ningún trabajador aceitero va a permitir este ataque. Vamos a defender hasta las últimas consecuencias los puestos de trabajo, que son la fuente de sustento y garantía de futuro para cada una de nuestras familias», le respondieron desde Aceiteros.